La ciudad de Vila-real aspira a captar para la basílica de Sant Pasqual a parte de los 300.000 visitantes anuales que llegan a la catedral de València para contemplar el Santo Grial que se custodia en ese templo. Así lo indicó ayer el concejal de Territorio, Emilio Obiol, en la apertura oficial de la jornada sobre turismo religioso que se desarrolló en la Biblioteca Universitària del Coneixement (BUC), organizada por la Agencia Valenciana de Turismo, y que también contó con la presencia del secretario autonómico del área, Francesc Colomer.

Como explicó Obiol, en estos momentos, la basílica y el monasterio sampascualino reciben a unas 3.000 personas anualmente. Cifra que el consistorio y la Fundación de Sant Pasqual pretenden multiplicar mediante una serie de acciones promocionales, entre las que destaca (como adelantó Mediterráneo el jueves) la edición de un libro elaborado por Jacinto Heredia, doctor en Historia del Arte, con la biografía y repercusión del fraile franciscano en el mundo. Asimismo, el edil de Turismo, Diego Vila, avanzó que durante los próximos meses trabajarán en la elaboración de la segunda parte del vídeo sobre el patrón de la ciudad, que esta vez se centrará en su vida en la población.

LAS PRIORIDADES // Por su parte, Colomer incidió: «El turismo religioso debe ser una de nuestras prioridades y tenemos que seguir formulando alianzas para crear un ecosistema en el que potenciemos nuestras singularidades, porque solo a través de la diferenciación llegaremos a aquellas personas que buscan el modelo que queremos ofrecer».

El secretario autonómico destacó la importancia de impulsar turísticamente la Ruta del Grial, sobre la que dijo que «es mucho más que un viaje, es el viaje de los viajes, la humanidad lo busca y es base de la literatura y el cine». Y subrayó que el sector turístico «nada tiene que envidiar, en cuanto a cifras, a otras áreas como pueden ser las de las industrias automovilística o agroalimentaria, entre otros».

El edil Obiol hizo hincapié en que «este ejecutivo local, desde el 2011 que es cuando cogió las riendas del gobierno de la ciudad, ha apostado de manera decidida por el turismo religioso», fundamentado en Sant Pasqual y todo lo que lo rodea. «Las cifras de visitas son modestas, pero sabemos que podemos crecer».