Especialistas en restauración de patrimonio histórico y artístico han iniciado los trabajos mediante los que pretenden poner en valor la imagen procesional de Sant Pasqual --sobre la que se trabaja en los talleres de CulturArts, en València--, así como la carroza en la que cada 17 de mayo realiza su recorrido por las calles del centro de la ciudad, cuyas tareas se realizan en unas dependencias del convento.

La intervención en el conjunto escultórico, que deberá estar finalizada como fecha tope el 15 de mayo, supone una inversión de 17.000 euros, cantidad a financiar a partes iguales entre la Generalitat valenciana y el Ayuntamiento de Vila-real, a través de la Concejalía de Tradiciones, que además cuenta con la colaboración del área de Turismo, que sufragará los trabajos de carpintería necesarios para subsanar algunas acciones relativas a la fijación de la imagen a la carroza.

Según informan a Mediterráneo fuentes de la Conselleria de Educación, Investigación, Cultura y Deporte, la obra escultórica que realizó Carmelo Vicent Suria en 1939 está afectada fundamentalmente por «suciedad superficial generalizada, así como por importantes pérdidas de policromía, más evidentes en los pies y manos del santo». Asimismo, también se aprecia fractura y encolado de varias falanges de la mano y señales de haber estado afectada por insectos xilófagos, lo que ha requerido de un tratamiento de desinsectación.

LA PEANA

Inma Porcellar, Elsa Marco y Llanos Flores son las encargadas de llevar a cabo, desde el pasado 1 de marzo, las labores en toda la estructura procesional sobre la que desfila Sant Pasqual.

Porcellar: «El trabajo se desarrolla en dos fases, una primera de limpieza y consolidación, tanto a nivel de soporte como de capa pictórica, en la que hay elementos plateados y otros cubiertos con plata corlada que le da un color dorado, aunque también hay aplicaciones de este metal precioso en piezas como los vestidos de los ángeles».

Posteriormente, las tareas seguirán un segundo apartado, «con la reintegración volumétrica y de la capa pictórica, que en algunos puntos se aprecia visiblemente dañada», señalan.

DAÑOS

En cualquier caso, las restauradoras destacan que uno de los elementos más deteriorados es el soporte, en forma de nube, sobre el que se asienta la imagen de Sant Pasqual, en el que existen «grietas de consideración», que se repararán en esta intervención. También se subsanará la falta de dos dedos de los ángeles de la carroza, que reconstruirá el vila-realense Pepe Traver, quien ya sumó en 1974 al anda procesional que se esculpió en 1940 el añadido para convertir la misma en la carroza actual, «una labor que el artista local realizó siguiendo el modelo original».