Recuperar el prestigio que Vila-real tiene desde hace años en lo referente a la imagen de los toros que se exhiben durante las fiestas patronales de Sant Pasqual y la Mare de Déu de Gràcia. Este es uno de los objetivos que se ha marcado la Comissió del Bou a la hora de elegir los astados que patrocinan la Junta de Festes y la Comissió de Penyes y de los que, en estos momentos, aún no se ha concretado su compra, “a falta de cerrar algunos flecos”, según explica el presidente del organismo taurino, Pascual Safont.

De alguna manera, la Comissió del Bou quiere dejar atrás la débil sensación que dejaron los toros exhibidos el pasado mes de mayo y, en especial, los problemas que se registraron en el encierro de cerriles, que acabó con la muerte de uno de los ejemplares al cornearle otro tras la salida.

“Estamos peleando por mejorar en calidad, y especialmente en presentación, los astados patrocinados por la Junta de Festes y los peñistas que saldrán a la vila en las próximas fiestas de la Mare de Déu de Gràcia”, explica Safont, quien informa que la exhibición de cerriles se realizará los dos sábados de festejos, así como el martes y miércoles, en el marco de unas celebraciones patronales que en esta ocasión se desarrollarán del 4 al 13 de septiembre.

NOVEDADES // Pero además de en la mejora de la presencia de los bous per la vila, la comisión que lidera Safont también trabaja para ofrecer novedades al programa taurino de la Mare de Déu de Gràcia. Novedades que, entre otros aspectos, pasan por recuperar por una noche el lugar que se utilizó décadas atrás para la embolada. De esta forma, este tradicional evento nocturno se pretende efectuar con uno de los ejemplares en el cruce del Raval del Carme con las calles Betxí y Molí --frente a la plaza de la parroquia de los Franciscanos--, mientras que el resto se llevarán a cabo en el lugar de costumbre: en la confluencia de la calle Josep Ramon Batalla (Barranquet) con el Raval del Carme.

Asimismo, Safont ha adelantado a Mediterráneo que el último viernes festivo (día 11) se programará un desafío de ganaderías, con reses de corro, mientras que el encierro de toros embolados que patrocina la asociación Amics del Bou se adelanta al martes 8 de septiembre, a las 23.00 horas.

Otro de los eventos que se repetirá en los próximos festejos de la Mare de Déu de Gràcia, tras el éxito de las celebraciones del 2014, es la exhibición de vaquillas cerriles. “Esta actividad contó con una gran acogida en septiembre del pasado año y por eso se vuelve a programar, con vacas cerriles que, tras su lidia, se sacrifican en el matadero”, señala Safont. H