El Ayuntamiento de Vila-real tiene en estos momentos en fase de trámite la creación de una bolsa de trabajo que permitirá la incorporación de al menos dos personas a la plantilla de Servicios Sociales. El objetivo de estas contrataciones «prioritarias» es agilizar las valoraciones que muchos mayores necesitan para acceder a las ayudas derivadas de la ley de la Dependencia, una competencia que a principios de año asumieron parcialmente los consistorios valencianos.
El concejal del área, Álvaro Escorihuela, afirma que estas dos personas «podrían estar trabajando a inicios del verano, si todo funciona con la celeridad que públicamente hemos pedido tanto desde Servicios Sociales como el alcalde, José Benlloch». Y es que el primer edil no descartó incluso externalizar el servicio al no haber personal en la bolsa anterior.
Aunque este incremento de personal posibilitará el desbloqueo de una situación complicada para muchas personas, los dos nuevos empleados públicos no se encargarán de hacer valoraciones, al menos en primera instancia. «Estas tareas las asumirán dos personas que ya trabajan hace tiempo en Servicios Sociales, porque ya han hecho este trabajo anteriormente y están formadas para ello», apunta Escorihuela. Y es que, añade el edil, «para realizar las valoraciones a personas dependientes hay que tener un curso de la Generalitat al que solo pueden acceder, paradójicamente, empleados municipales».
SITUACIÓN COMPLEJA
Es por ello que los dos trabajadores sociales nuevos asumirán parte del trabajo de dos de los seis trabajadores con más experiencia, con el objetivo de que estos «se dediquen durante toda su jornada a desatascar una situación que lleva años bloqueada». El motivo principal es que, hasta el 2017, cuando las competencias eran autonómicas, tan solo había dos empleados realizando estos diagnósticos en toda la provincia de Castellón.
Muchos ayuntamientos ya han incorporado a valoradores en los meses recientes, pero la renuncia de una docena de personas que integraban la última bolsa de empleo de Servicios Sociales obliga a la redacción de unas nuevas bases para acceder a estos empleados.
Por el momento, y a modo de solución temporal, el Consell ya ha anunciado a los municipios que tienen dificultades en las contrataciones de que los dos técnicos continuarán realizando su trabajo durante un tiempo más, para no dejar totalmente desatendido a un sector de la población que en algunos casos hace años que espera una subvención.
En paralelo, la plantilla de Servicios Sociales también tiene órdenes de dedicar una parte de su jornada a estos menesteres.
