El alcalde de Vila-real, José Benlloch, se reunió ayer de urgencia con el delegado en la ciudad de la Agencia Tributaria, Manuel Rodríguez, para buscar una solución a la situación creada por los requerimientos de embargo de ayudas sociales recibidos en el consistorio. Y es que el munícipe denunció el martes que habían recibido 14 instancias para paralizar las partidas de emergencia que otorgan a familias necesitadas para sufragar gastos básicos. Hacienda pide el bloqueo de estas cuantías para que dichas cantidades vayan a sufragar las deudas de estos hogares beneficiarios con alguna administración.
El primer edil agradeció la “humanidad” demostrada por el delegado y los técnicos de Hacienda para “buscar la fórmula” que permita evitar “la indecencia que supondría que nos obligaran a embargar las ayudas que otorgamos a las personas y familias que las necesitan para cuestiones vitales para cubrir multas y deudas con la administración”. “Hemos estado trabajando para encontrar una solución desde el punto de vista humano y tengo que agradecer al delegado que se ha volcado en dar respuesta a esta injusticia, pidiendo informes jurídicos y buscando la manera que nos permitirá oponernos a los requerimientos con fundamentos jurídicos e informes de Servicios Sociales para que sean finalmente rechazados”, aclaró Benlloch.
Estas ayudas de emergencia son complementarias a la renta garantizada de ciudadanía de la Generalitat para hacer frente a gastos como el pago de la luz, el agua o la comida. El alcalde ya avanzó que si no se resolvían los embargos iría a los tribunales. H
