La Unidad de Diversidad de la Policía Local (Unidipol), creada el pasado mes de octubre, ha sido reconocida con los premios Daniel Wagman a las Buenas Prácticas en la Gestión Policial de la Sociedad Diversa. El galardón, otorgado el pasado 8 de mayo por el plenario de la Plataforma por la Gestión Policial de la Diversidad, es un reconocimiento al “importante trabajo que está desarrollando la Policía Local, a través de su Unidad de Diversidad (Unidipol)” en este ámbito. El premio será entregado el próximo 6 de junio en Córdoba.

La Unidad de Diversidad de la Policía Local de Vila-real tiene entre sus objetivos la sensibilización y formación de los miembros de este cuerpo policial en materia de gestión de la sociedad diversa, establecer relaciones con los diferentes colectivos vulnerables existentes en la ciudad y dirigir acciones para la prevención e intervención en caso de incidentes discriminatorios. Desde su creación en octubre de 2012, la Unidipol ha desarrollado importantes acciones en materia de gestión de la diversidad desde el ámbito policial, como la organización de la I Jornada Formativa sobre Diversidad, con la participación del presidente nacional del Movimiento contra la Intolerancia, Esteban Ibarra Blanco, o la campaña ‘Vila-real se limpia de prejuicios’, que ha permitido, en coordinación con el GD’OS, la eliminación de pintadas de contenido racista o xenófobo en la ciudad.

Los reconocimientos a las Buenas Prácticas en la Gestión Policial de la Sociedad Diversa son distinciones honoríficas, destinadas a reconocer a los servicios policiales que han desarrollado buenas prácticas en aspectos como la promoción de acciones positivas para favorecer el ingreso en la policía de personas pertenecientes a colectivos sociales minoritarios; el registro estadístico específico de los delitos de odio y la elaboración de protocolos para la actuación policial en relación a estos delitos; el desarrollo de medidas para impulsar el acercamiento de la policía a los colectivos sociales minoritarios; así como el desarrollo de políticas públicas específicas, para mejorar la atención policial a los colectivos minoritarios; y la puesta en marcha de medidas, así como la definición de instrucciones y criterios respecto a la identificación de personas en lugares públicos, para establecer medidas de prevención y control del “perfil racial” y cualquier otro sesgo discriminatorio.