Como manda la tradición, los peñistas de Vila-real se dieron ayer cita en una nueva edición, y ya van 76, del concurso de paellas que organiza desde hace casi cuatro décadas la Comissió de Penyes. Este año fueron prácticamente 2.500 los asistentes al primer macroevento gastronómico de las fiestas de Sant Pasqual.

Tras una mañana entre fogones, los miembros de la peña Mai Tenim Prou se alzaron con el máximo galardón, seguidos de La Fusta. Se trata de dos colectivos con una larga trayectoria en este certamen, con varios podios en su palmarés. En tercera posición quedó la peña Moscardó.

100 colectivos // Según el presidente de la Comissió de Penyes, Juanjo García, un centenar de entidades festeras pasó a recoger su lote para preparar este tradicional plato valenciano aunque «por circunstancias varias, no todos se quedan al concurso y prefieren degustar la comida en sus casals». Ni el cansancio de la primera noche de celebraciones, que se vive con intensidad, ni el calor y las cuatro gotas que cayeron a mediodía restaron participación a este acto que desde hace varias ediciones se celebra en la avenida La Murà, un hecho que favorece la asistencia y atrae incluso a curiosos a los que no les importa acabar ahumados para disfrutar del ambiente. La bebida fresca --había dos puntos habilitados por la Comissió-- fue una de las mejores aliadas para contrarrestar el bochorno y las altas temperaturas del día.

Los particulares chefs de cada grupo pusieron pasión y cariño para lograr el sabor, punto de cocción y presentación capaces de conquistar los paladares tanto de los miembros del jurado como de sus compañeros de mesa.