El conseller de Educación, Vicent Marzà, se ha comprometido a tratar “con interés y estudiando todos los argumentos” las alegaciones del colegio Bisbe Pont, tendentes a que la Administración autonómica no haga efectiva finalmente la supresión de la unidad de Infantil de tres años.

Así lo ha indicado el alcalde de Vila-real, José Benlloch, quien se muestra convencido de que “todo saldrá bien”. Y advierte de que en el caso de que la Conselleria desestime el alegato del centro, apoyado por el Ayuntamiento y el Consell Escolar Municipal, harán “lo que haga falta”, incluso están dispuestos “a presentar un recurso contencioso-administrativo”.

También en este sentido se refirió la diputada autonómica de Ciudadanos, Mercedes Ventura, en su visita ayer el Bisbe Pont. “Marzà se ha comprometido a revisar el cierre de unidades de centros que hagan una función social, lo que abre una puerta de esperanza a este colegio”, dijo.

Por su parte, el portavoz del PP, Héctor Folgado, exigió al alcalde Benlloch que “actúe para agilizar la resolución de las alegaciones” presentadas contra la supresión de la unidad de Infantil de tres años del colegio Bisbe Pont, teniendo en cuenta que el proceso de escolarización arranca el próximo 9 de mayo. Y acusa al alcalde de “ocultar la decisión de sus jefes en Valencia”. H