Vila-real es sinónimo de liderazgo en mediación, tanto en el ámbito policial como en el escolar. Y en este último caso, el instituto Miralcamp fue pionero en su día en la aplicación de una metodología que evita que los conflictos entre alumnos vayan a más y que, por tanto, los expedientes disciplinarios vayan a menos.

Y al amparo de este liderazgo nació la asociación El Porc Espí, cuya presidenta, María Emilia Mundina, ejerció de psicopedagoga hasta su jubilación, impulsando un proyecto que, hoy por hoy, se ha extendido ya a todos los centros educativos de Vila-real, así como a otros muchos de la Comunitat y de España.

Pero Mundina no ha cejado en su empeño por continuar difundiendo la mediación escolar, no solo entre los alumnos de colegios e institutos, sino también entre profesores y padres. Tal es su tesón que, ahora, desde El Porc Espí, y con la ayuda de varios colaboradores, ha organizado un campus de mediación en el paraje del Termet, que se prolonga hasta hoy, en el que participa una treintena de estudiantes de centros educativos de Vila-real y del resto de la provincia, como son el propio Miralcamp; Virgen del Carmen; Fundación Flors; IES Francesc Tàrrega; Vicent Castell y Penyagolosa, de Castelllón; Serra d’Irta, de Peñíscola; y Botànic Cavanilles, de la Vall d’Uixó. Y a ellos se suman jóvenes de la asociación Madiba, del municipio de Los Palacios (Sevilla), «con la que trabajamos desde hace unos seis años», explica Mundina.

Actividades

El programa de actividades que realizan los participantes en este primer campus de mediación, que se desarrolla en el paraje del Termet, incluye presentaciones, puesta en común de experiencias mediadoras, un espacio de reflexión, momentos de relajación, yincana en el entorno del albergue y del ermitorio de la Mare de Déu de Gràcia, talleres, paseos nocturnos, pintura y charlas.

Asimismo, una de las citas más esperadas de la iniciativa fue la conferencia celebrada en la tarde de ayer en el Centre de Congressos El Molí y abierta a toda la ciudadanía, protagonizada por Xuxo Ruiz, maestro finalista del Globalteacher Prize 2018, conocido popularmente como el Premio Nobel de los docentes. Ruiz abundó en la necesidad de educar a los niños y los adolescente «con magia» y contando con las emociones como las mejores aliadas.