El Ayuntamiento de Vila-real lanza para las fiestas de Sant Pasqual que arrancan mañana un programa pionero que, bajo la denominación de Ilusión sin barreras, pretende que ningún niño se quede sin poder acceder a la feria de atracciones.

El alcalde, José Benlloch, ha anunciado que el consistorio negocia con la Asociación de Feriantes de Vila-real la adquisición de unos 2.000 pases para hacer uso de las atracciones a lo largo de los festejos. Unos tickets que se entregarán a las entidades que trabajan con las familias derivadas de Servicios Sociales, como Creu Roja, Cáritas, Joventut Antoniana o San Vicente de Paúl, para que los distribuyan entre las que tienen niños. "Nos produce tristeza ver que, a pesar de la mejora de la situación económica, todavía hay familias que no pueden permitirse llevar a sus hijos a la feria, incluso recibiendo ayuda”, explica el primer edil, quien añade que “queremos una ciudad más sensible y humanizada y por ello lanzamos este programa pionero que funcionará ya estas fiestas”.

Además de las cuatro asociaciones ya citadas, el Ayuntamiento también entregará entradas a la Associació d’Aturats Vila-real (Adavi) y a la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH) y al colectivo Sillas del hambre, para que hagan el reparto pertinente.

“Es una cuestión de igualdad y sabemos que las entradas podrían llegar a unos 1.000 niños cuyas familias pasan por dificultades”, apunta Benlloch, quien asegura que “la inversión inicial es para 2.000 pases, pero sobre la marcha veremos si es preciso comprar algunas más a lo largo de la próxima semana, dependiendo de cómo discurra el plan”.