La ronda suroeste de Vila-real es una infraestructura «prioritaria» para la Conselleria de Obras Públicas y por ello reiteran su «firme voluntad» de ejecutar la circunvalación durante esta legislatura. Así lo asegura su responsable, María José Salvador, quien destaca: «Nos comprometimos con este proyecto, a pesar de la coyuntura económica, y será una de las inversiones más importantes». «No buscamos ningún conflicto y no se paraliza nada, ni está en duda, solo buscamos soluciones a las dificultades», argumenta.

Para sacar adelante el vial, tras las informaciones sobre el riesgo de inundabilidad del enlace con la N-340, «un problema grave según los resultados», apunta Salvador, y la negativa de Fomento a la rotonda, el Consell propondrá al Ayuntamiento, en una reunión prevista para el 20 de febrero, dos opciones de futuro.

Alternativas

La primera consiste en fragmentar la construcción en dos fases. Es la preferible para la Generalitat. La inicial sería la ronda, tal y como se concibió en su momento, ya que no tiene ningún inconveniente de conexión con la carretera nacional, ni problemas relacionados con inundaciones. Únicamente se conectaría el extremo sur con los viales del polígono industrial de Porcelanosa, ya que están unidos con la 340, sin afectar zonas residenciales.

La segunda etapa se gestionaría al mismo tiempo, pero evitando que la tramitación retardara la intervención. Sería el paso para obtener las autorizaciones y los informes favorables de la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) para hacer la rotonda prevista en un principio o buscar una alternativa de diseño.

Planteamiento único

Por otro lado, ofrecerán gestionar la actuación en un único proyecto técnico, con un planteamiento que sea finalmente aceptado por el consistorio, Ministerio de Fomento y la CHJ. Los problemas hidráulicos exigen soluciones muy complejas, como el desvío de las aguas de los barrancos hacia el río Sec, justo arriba del puente de la N-340 o, previsiblemente, aguas hacia abajo del mismo punto, por las limitaciones de la capacidad actual. Esta solución paralizaría las reformas, a la espera de resoluciones oficiales, «unos procesos que son lentos», según el Gobierno autonómico.

Con todo ello, la responsable de Obras Públicas indica que «la rotonda de enlace con la carretera nacional fue un añadido, primero no estaba, y ahora surgen estas trabas. Hay que buscar una fórmula consensuada para que en verano esté redactada la obra, sin renunciar al anexo, pero la CHJ podría retrasarlo todo».

La circunvalación reivindicada por la ciudad permitirá una buena conexión del polígono industrial, donde tiene sede Porcelanosa, con la red de carreteras CV-20 y N-340, evitando el paso de camiones por zonas habitadas.