Carlos Gil, concejal del PP en el Ayuntamiento de Vila-real, afirma que «el desastre en la gestión» del alcalde, José Benlloch, «ha hecho que se dispare el plazo medio de pago a proveedores y que el consistorio tarde más del doble del tiempo que marca la legislación». Así, el edil popular, asegura que «mientras la ley establece que debe abonarse a un máximo de 30 días, el Ayuntamiento de Vila-real lo hace a 62», y añade que ciudades de la Comunitat de tamaño similar, «como es Alzira, ingresa los recibos en 15 días».

En este sentido, Gil insta al ejecutivo local a que «se apruebe el presupuesto antes de que acabe el año, para que entre en vigor en enero porque, de lo contrario, lo retrasan todo y los proveedores tardan aún más en cobrar».

Para el edil popular, «la irresponsabilidad de Benlloch es cada vez mayor» y le exhorta a «corregir esta grave situación».