Si hay un lugar perfecto para rendir un cálido homenaje al que fuera concejal de Vila-real y defensor acérrimo del parany, Pasqual Batalla --fallecido el pasado mes de junio-- es la rotonda de la avenida Europa, en el centro de la cual se erige una de estas antiguas infraestructuras de caza.

La glorieta, adecentada para la ocasión por un grupo de paranyers, acogió ayer una nueva edición de la Trobada de Xiuladors, evento que impulsara el propio Batalla, a quien el actual edil de Tradiciones, Santi Cortells, junto al resto de asistentes, rindió pleitesía a quien fuera su antecesor.

«Pasqual era una persona reflexiva, que disfrutaba solo con escuchar el canto de los pájaros», dijo Cortells, quien hizo hincapié en que esta cita se celebra por tercer año consecutivo y que, con ella, no solo se pretende reunir «a los aficionados al reclam y recordar esta entrañable tradición, sino que también sirve para honrar a los paranyers que ya no están entre nosotros».

El alcalde, José Benlloch, y buena parte de la corporación tampoco quisieron faltar a esta cita, esta vez en memoria de Batalla.