La fundación Pro-Monasterio de la Basílica de Sant Pasqual de Vila-real comenzará su andadura en otoño. La entidad nace con el propósito de hacer del templo un referente turístico y cultural. El secretario del ente, Manuel Menero, confirmó que la Generalitat valenciana “ya ha dado el visto bueno a la constitución, por lo que solo falta que las instituciones colaboradoras donen su aportación y la aprobación final”.

En este sentido, el diputado de Cultura, Héctor Folgado, indicó que “las cantidades están listas tal y como se acordó cuando se decidió fundar esta institución”.

Esta se regirá bajo las directrices de un patronato, en el que tendrán representación el Ayuntamiento, el Consell --a través del Instituto Valenciano de Conservación y Restauración (Ivacor) y el Instituto Valenciano de la Música (IVM)--, la Diputación de Castellón, Caixa Rural Vila-real y la Asociación Amics del Pouet del Sant, impulsora de la iniciativa.

Entre otros objetivos, destaca la preservación y puesta en valor del emblemático carrillón, “un instrumento muy antiguo pero muy importante y cuyo mantenimiento es delicado”. El IVM se encargará de esta función y están “estudiando la posibilidad de que los alumnos puedan realizar prácticas con el órgano o acoger conciertos. Hay que tocarlo y usarlo para que no se deteriore”.

También se pretende que la basílica acoja exposiciones religiosas, como “una muestra artística sobre la Virgen María y el niño Jesús” que les sería cedida.

Y es que el fin es realizar el máximo de actividades posible “sin grandes inversiones, pero no se puede dejar parada la cultura”, señala. En este sentido, Folgado resalta que “las administraciones local y provincial darán 5.000 euros al año y los institutos ofrecerán sus servicios de restauración y mantenimiento”. Y es que “la recuperación del carrillón es costosa, pero gracias al convenio suscrito esta actuación resultará mucho más económica”.

NUEVAS VISITAS // Uno de los deseos de la fundación es poder hacer visitable el campanario del templo. La idea sería, según Menero, “habilitar una escalera de caracol, de hierro o madera, desde la capilla de Sant Pere d’Alcàntara, y permitir el ascenso para que los ciudadanos puedan contemplar las campanas”.

“El objetivo es poner en marcha todos los proyectos durante la próxima temporada para poder dinamizar la iglesia”, señala.

Para Folgado, Sant Pasqual “no es solo un referente en la ciudad, sino en el resto de la provincia y hay que darle un empujón a nivel turístico”. “Ha sido un proceso largo y costoso, pero todas las partes nos comprometimos a sacar adelante el programa”.

El templo comenzará una nueva etapa para poder consolidarse como uno de los monumentos religiosos más destacados. H