El alcalde de Vila-real, José Benlloch, apuesta por deshomologar la actual carretera N-340, de manera que deje de ser de titularidad estatal y pase a ser de uso comarcal o a modo de circunvalación. Una decisión esta que permitiría desbloquear el PAI Solades, el programa urbanístico de carácter residencial más importante, que afecta a una superficie próxima a los 400.000 m2 y en la que se calcula que podrían construirse en torno a 2.500 viviendas.

“Esta es una cuestión importante de futuro que hay que valorar, aunque es un tema complicado y se tendrá que esperar a lo que diga la Generalitat al respecto”, señala Benlloch, a la vez que recuerda que, en la actualidad, “hay otra alternativa a esta vía de carácter estatal como es la autovía de la Plana”. Y añade: “Si se deshomologara la N-340 como carretera estatal y se convirtiera en autonómica o comarcal, ello permitiría reducir los límites de velocidad en ella e incluso prohibir la circulación de camiones de gran tonelaje, que ya pueden circular por la autovía”.

De esta forma, el primer edil vila-realense ratifica la voluntad del equipo de gobierno cuatripartito de redefinir las líneas del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), de manera que siga siendo rústico la mayor parte del suelo de la partida de l’Horta. “No es una prioridad que tengamos que saltar la N-340 para que crezca la ciudad”, afirma.

Y es que en marzo del 2009 la Unidad de Carreteras del Estado en Castellón confirmó la existencia de un informe “desfavorable” del Ministerio de Fomento al considerar que “el plan produce afección en el tráfico en la nacional 340, una vía que de por sí ya está muy saturada, y porque incumple la normativa medioambiental en materia de ruidos”.

Es por ello que desde el anterior ejecutivo local del PP se defendía el traslado de la carretera junto a la futura línea del AVE. Una propuesta que el actual alcalde, José Benlloch, considera “inviable”, sobre todo por la situación económica de las administraciones públicas, a la vez que lo considera “innecesario” al contar con la posibilidad de desviar el tráfico por la autovía de la Plana.

En cualquier caso, la crisis --que ha afectado gravemente al sector de la construcción-- también ha contribuido a dejar en stand by un programa urbanístico cuyos inicios se remontan al 2002.

SUELO // El alcalde Benlloch garantiza que el PAI Solades mantendrá su presencia en el próximo PGOU, aunque recuerda que en el casco urbano consolidado existe terreno suficiente para construir entre 20.000 y 25.000 viviendas, lo que generaría espacio para otros 70.000 habitantes, teniendo en cuenta los diferentes PAI y convenios urbanísticos que están pendientes de desarrollar, como son la Bassa d’Insa o los de Alaplana, Azuvi y Fritta. H