La Generalitat valenciana adeuda a la Concejalía de Servicios Sociales de Vila-real más de 640.000 euros, tal y como denuncia la regidora del área, Mònica Àlvaro.
Esta cantidad corresponde a ayudas y programas sociales del 2011, el 2012 y el 2013. La concejala detalló que las ayudas directas para personas que pasan por dificultades económicas ha de aportar el 36% y todavía no nos ha dado nada. “Para el departamento es muy duro hacer el presupuesto año tras año”, dicen.
Y es que “no podemos dejar de lado a las personas que más lo necesitan y por ello debemos estar la lado de los vecinos, aunque las subvenciones siguen sin llegar”.
Todavía no se ha cumplido con la aportación del 2011 para el centro de día. Del 2012 faltan las cantidades correspondientes para la Unitat de Prevenció Comunitaria y el centro de día; mientras que del año pasado “no nos han consignado los 350.000 euros que se han de abonar para ayudas generales”. También están afectados “el centro Lluís Alcanyís y la unidad de dependencia”.
En cuanto a este año, Àlvaro destaca que, pese a que aún no se ha liquidado, dentro del ejercicio se tendrían que abonar los 17.000 euros por poner en marcha el comedor escolar para niños necesitados durante el verano.
Precisamente, la regidora ya fue crítica en su día con las condiciones que puso la Conselleria de Bienestar Social y por ello se aprobó una moción en el pleno para que se flexibilizarán los plazos y los requisitos exigidos.
Asimismo, se dio el visto bueno a otra propuesta para exigir a la Generalitat el pago inmediato de la deuda, aunque era global, por lo que Servicios Sociales se incluía dentro del paquete.
“Necesitamos que se pongan al día cuanto antes, el Ayuntamiento ya hace un esfuerzo enorme para cumplir con los ciudadanos y mantener todos los servicios”, aseveró, ya que “los convenios de ayudas directas no se han llevado a cabo”. Del centro de día, el Consell aporta el 40% del coste, mientras que de la Unitat de Prevenció se encarga del 60%. H
