El Ayuntamiento de Vila-real, a través del departamento de Territorio, estudia llevar a cabo un nuevo proyecto ligado a la agricultura, esta vez utilizando la parcela de titularidad municipal que ocupa el antiguo cauce del Barranquet --desde hace unos años canalizado adecuadamente por el subsuelo de la avenida Cardenal Tarancón-- desde la actual pasarela que da acceso desde este vial al jardín Jaume I y hasta llegar a la calle Constitució.

Así lo ha confirmado a Mediterráneo el concejal del área, Emilio Obiol, quien explica que “el objetivo de este plan es recrear la historia agraria de la ciudad, creando un paseo en el que tendrán una especial presencia aquellas especies vegetales y arbóreas que se cultivaban en el término municipal con anterioridad a la llegada de los cítricos, tales como algarrobos, olivos y viñas”.

El nuevo espacio verde que se plantea desde el consistorio para esta zona se extiende a lo largo de algo más de 150 metros junto a la calle Cardenal Tarancón. “Será como un homenaje en vivo a quienes han cultivado las tierras de Vila-real a lo largo de la historia, a la vez que con el proyecto también se pretende que tenga una función formativa, de manera que los escolares y estudiantes de ESO y Bachillerato conozcan de primera mano que el actual paisaje de nuestro término municipal no tiene más de 150 años y que antes de los naranjos, la gente se ganaba la vida con otro tipo de cultivos”, destaca Obiol.

MOLÍ LA VILA // Por otra parte, siguen avanzando las obras de consolidación y adecuación del antiguo edificio del Molí la Vila, financiado a partes iguales por la Diputación de Castellón y el Ayuntamiento. Unos trabajos que arrancaron el pasado mes de julio, casi dos años después de la firma del convenio entre las dos instituciones, que se comprometieron a aportar en conjunto un total de 360.000 euros.

Las primeras labores de esta intervención han consistido en la retirada de la cubierta --que, en parte, contenía tejas de fibrocemento--, a la vez que se ha excavado en su entorno para sacar a la luz los muros que se encontraban enterrados bajo la tierra que, durante décadas, se ha acumulado en este espacio. Unas excavaciones que han desenterrado, al menos, dos puertas con arcos ojivales o apuntados de este inmueble del siglo XIV. H