La concejalía de Servicios Públicos ha acometido este verano la renovación de la placeta ubicada en la confluencia de las calles Molí Bisbal y Almazora, con el objetivo de dotar al barrio de “un punto de reunión del vecindario más digno y adaptado para las personas con dificultades de movilidad”. El concejal del área, Francisco Valverde, recuerda que este espacio, muy utilizado por los vecinos de la zona, estaba en muy mal estado y con pasos accesibles fuera de normativa. Además, la glorieta es también un punto de intensidad de tráfico, al encontrarse en las inmediaciones del campo de fútbol y servir de acceso a la zona del Madrigal.

Por todos estos motivos, las brigadas municipales, en colaboración con una empresa local, han renovado completamente la zona, con la sustitución de los pavimentos y bordillos en su totalidad, de manera que “se ha dado a la placeta mayor superficie, ganando espacio para el vecindario por un lado y, por el otro, logrando también una mejor ordenación del tráfico rodado”. La actuación ha incluido también la construcción de dos pasos adaptados y la dotación de mobiliario urbano, con bancos, jardineras y mesa, además de la instalación de una pérgola, en la línea de las remodelaciones de parques y jardines que Servicios Públicos ha emprendido en los últimos meses.