Los miembros de la Asociación Enológica de Castellón nos sumergimos el pasado jueves por la noche en el mundo del vino romano.
De la mano de Alejandro Vera, arqueólogo y gerente de la empresa Dinamo Cultura SA, aprendimos la distinción entre vino joven y vino viejo, entendido este último como un vino criado al menos durante un año en tinajas de barro o dolias.
Tenían gustos tan curiosos como introducir las ánforas de vino en un fumarium (ahumadero) para transmitir el sabor ahumado a los vinos, o plantar romero y tomillo junto a las viñas para que su aroma se pasase al vino a través del suelo y las raíces.
Fue una cata distinta. No se trataba de evaluar los vinos, sino más bien de conocer la tipología e historia de los vinos hispanos de Baetica en la época romana.
Se cataron cuatro vinos, uno de ellos fue 'Mulsum', un vino endulzado, al que se le añade miel para provocar una segunda fermentación. Resultó un vino de nariz intensa y notas de miel e higos; intenso en boca con notas de miel de encina, pimiento y frutillos rojos. Largo y persistente.
Los otros tres vinos se correspondían a vinos Condita, vinos macerados con pétalos de flores, especias y resina.
El primero de ellos fue 'Sanguis', de sobresaliente intensidad aromática a pétalos de rosa y confitura que daba paso a notas más sutiles de tostados y miel.
'Antinoo' tenía una nariz muy marcada de violetas y uvas pasas. Largo y persistente final con notas dulces de miel.
'Mesalina', de nariz potente con aromas de canela y miel; intenso en boca y con final dulce.
Agradecer a Alejandro el esfuerzo realizado para poder estar con nosotros y ahora, a hacer los deberes!!! Buscad el mejor maridaje para cada uno de ellos o bien tomadlos sencillamente como aperitivo o como sustituto de las bebidas de trago largo tras la comida.
