Tras el paréntesis de los dos últimos años por la pandemia, en la noche de este sábado Segorbe quemó su falla de la Plaza Almudín, como conclusión a una serie de actos que fueron seguidos por gran número de espectadores, ante la excelente noche que quedó tras una tarde algo desapacible.
Con este retraso de un mes sobre la fecha normal de las celebraciones falleras se garantiza la presencia en los eventos de los numerosos vecinos y visitantes que en la festividad del santo se desplazan a Valencia para vivir los actos falleros en la capital del Turia.
Pasadas las once de la noche se entregó al fuego la falla, entre algunas lágrimas y como conclusión a unas jornadas festivas que cuentan con los ingredientes esenciales de la fiesta como pasacalles, castillos, mascletás, cenas y comidas, y la tradicional y la ofrenda de flores a la Virgen de los Desamparados.
Entre las entidades que participaron en la ofrenda se encontraban la Asociación de Mujeres de Segorbe, la Asociación Fray Luis Amigó, Asociación Virgen de la Esperanza, la Asociación Santa Cecilia y las Doncellas Segorbinas Virgen de la Cueva Santa.
También acudieron las falleras mayor e infantil con su presidente de la Falla Blanquerías de Valencia, la fallera mayor e infantil con sus presidentes de la Falla Ramiró Maeztu-Lleons de Valencia, la fallera mayor con su presidente de la falla Sud-Oest de Vall d’Uixó, y la fallera mayor e infantil de la Junta Local Fallera de la Vall d’Uixó.
No podían faltar en este evento, la reinas mayor e infantil y sus cortes de honor de las Fiestas Patronales de Segorbe y los representantes de la Comisión de la Falla Plaza Almudín con su presidenta, Arantxa Sanchis, y la fallera de honor, Eva Mª Rodríguez.
La cremà estuvo acompañada de un espectacular ramillete de fuegos artificiales de Pirotecnia Mediterráneo, y posteriormente contó la presencia del Dj Jesús Martín.
La Falla Plaza Almudín se prepara para la celebración de su vigésimo aniversario que representa consolidación y tal vez por ello ha recibido el reconocimiento de la Generalitat Valenciana con la consideración oficial de un festejo más de las fiestas falleras.
