Ubicado en la cabecera del río Palancia, el municipio de Bejís cuenta con un término municipal en el que el agua se convierte en protagonista. Así han podido comprobarlo los alumnos de primero de Gestión Forestal y del medio natural del Departamento Agroforestal del IES Alto Palancia, que han realizado una salida formativa en la zona del nacimiento del río para la identificación de especies de ribera, y su clasificación edáfica y climatófila, con Botánica agronómica, en la senda botánica La Torrecilla

El recorrido ha servido para conocer mejor la botánica de Bejís. Mediterráneo

El agua está presente en Bejís, en primer lugar, por el río Palancia y la red hidrográfica tributaria, como el río Canales, los barrancos del Resinero, de la Hoz, la Serratilla, y el de la Muela. En segundo lugar, por la existencia de neveras, que históricamente producían hielo para su venta en València, localizadas en Peñascabia y Peña Juliana. En tercer lugar, las numerosas fuentes y manantiales. Se trata de surgencias de agua subterránea distribuidas por el término, como las fuentes de Martín, Sabuco, Pericona, Gila, Bullidores, Pozo del Agua Buena y Quiñón. El agua se ha utilizado tradicionalmente para el regadío, que se extiende por unas 120 hectáreas, localizado en ambas márgenes del valle del Palancia, mediante una red de acequias principales, como la acequia del Pueblo, Solana, Los Espárragos, Molino Viejo o la de los Toscos. Finalmente, el agua de Bejís es conocida por la presencia de una embotelladora que comercializa el agua de los manantiales de Los Cloticos.

Agricultura y éxodo rural

Comentaba el botánico Cavanilles a finales del siglo XVIII sobre Bejís y su agricultura: “(…) queda erial y para pastos la mitad del término. Todo, por lo común, está sin árboles fructíferos, excepto las huertas, donde hay un sin número de cerezos, moreras y varios frutales. Hállanse las huertas en las riberas del rio en sitios hondos y abrigados por las colinas ó montes circunvecinos, y en ellas multplican aquellos labradores sus produccioines, que son maíz, seda, cáñamo, trigo, frutas y hortlizas. En el secano tienen algunas viñas, higueras, olivos, y muchísimos sembrados, siendo esta la principal cosecha del término”.

La superficie cultivable de Bejís se ha reducido constantemente desde los años cincuenta del siglo XX, de unas 900 hectáreas a unas 200 actuales. Se cultivan olivos (125 ha, 80 en regadío), y almendros (65 ha, 53 en secano). Una reducción acompañada del éxodo rural: en 1900 había 1.276 habitantes, en 1950, 1.103; 680 en 1970, 376 en 1991. Desde entonces el número de besijeros/as ha oscilado en torno a los 400: 452 en 2008; y 390 en 2021.

Claves históricas

Del Bronce ha habido hallazgos en la Cueva de la Purna, el Mardano, las Pedrizas del Cerro, la Solana de Bejís o el Puntal del Turco. Hay referencias de restos íberos en las proximidades de la Masía de los Pérez, Carrasca Gorda, el Romeral y la Hoyata. Del período romano sobresale La Portera, La Purna y el Paso del Toro.

Vista del municipio y el castillo. Miguel Lorenzo

El origen de la población podría ser romano. El castillo de Bejís, domina el pueblo, a 800 msnm. Es de origen romano, transformado y reformado por los musulmanes y cristianos. Su planta se adapta al relieve montañoso, es irregular, con un cuerpo principal y un extenso albacar. En el siglo XIII Jaime I lo cedió a la Orden de Calatrava, de ahí que en la parte superior de la puerta principal se encuentre el escudo de la orden. En el siglo XVI volvió a la corona, y fue rehabilitado durante el siglo XIX. Hoy está en ruinas.

También de origen romano es el acueducto de Bejís, con cinco arcos de medio punto, y unos 80 metros de longitud. Es un Bien de Interés Cultural, BIC, construido de sillares y mampostería. Se localiza en el paraje de Los Arcos.

Patrimonio cultural y rutas

Además del castillo y el acueducto, destacan varios elementos de interés patrimonial. En el religioso destaca la Iglesia parroquial de Nuestra Señora de los Ángeles. Construida en el siglo XVI, modificada durante los siglos XVII y XVIII, se caracteriza por su portada renacentista y un atrio ajardinado. Es Bien de Relevancia Local (BRL). Es de nave única, de cuatro tramos y varias capillas laterales, y pinturas murales del siglo XVIII. Además, destacan las ermitas de Loreto, San Miguel y San Juan en Arteas de Abajo.

El pueblo muestra un interesante callejero, adaptado a la elevación montañosa dominada por el castillo. Calles empinadas, otras siguen las curvas de nivel. Calles como las de Peñas Altas, Peñas Bajas, Miralles, Ballestería, Caballeros y Cloticos. Por el norte y por el este, discurre el río Palancia; por el sur, el río Canales; ambos confluyen en el sureste.

El paisaje en torno al pueblo es espectacular. En los fondos de los valles hallamos las huertas tradicionales, adaptadas a las condiciones del terreno. Manantiales, azudes, acequias, lavadero… configuran el sistema de regadío. En las laderas de los relieves destacan las parcelas en forma de graderío, que configuran un paisaje abancalado de olivos y almendros, tan característico de la montaña mediterránea.

Vista del pueblo de Bejís. Miguel Lorenzo

Varios senderos permiten conocer su patrimonio y sus paisajes. La SLV-53, Sendero de La Hoz-los Pérez, de 3,8 km, con dificultad baja, que recorre senda de montaña y camino de tierra. El SLV-54, Sendero de los Miradores, que parte de la calle de los Cloticos y finaliza en el acueducto. El primer tramo se dirige hacia el río Palancia, con excelentes vistas panorámicas, y tramos de regadío histórico; y la vuelta se realiza por el valle del río Canales. Unas tres horas de recorrido. El SLV-55, Sendero Fuentes de Arteas, unos 5.400 metros, entre las dos aldeas, Arteas de Arriba y de Abajo. Ruta circular. Excelentes parajes relacionados con el agua, como las pozas, el río Canales.

Bejís tiene un recurso turístico de dimensión internacional, el Sendero de Gran Recorrido GR-7, cuyo recorrido es “mediterráneo”, desde sur de Grecia hasta sur de España. El Sendero europeo E-4. Por Bejís transcurre el GR-7, siendo el pueblo inicio y final de etapa. La ruta transcurre desde el Mas de Noguera (noreste) y Andilla (suroeste). En este tramo meridional transcurre además el GR-10, de Javalambre a la Calderona.

En Bejís discurre además el PRV-80, una ruta de 26 kilómetros entre Teresa y Pozo Junco, que recorre buena parte del cauce del río Palancia. Transcurre por las Ventas de Bejís, Molino del Infante, el caserío de Rios de Arriba y El Molinar. La ruta llega hasta Canales.