El reloj marca la hora: a las 10.00 horas de este martes la campana Quiteria inició el ascenso hasta su vano en la torre campanario de la parroquia de Santa Quiteria de Torás, volviendo a su lugar de procedencia con una nuevo cabezal de madera y con el brillo de una buena limpieza que ha dejado al descubierto el color original del bronce.

La empresa 2001 Técnica y Artesanía de Massanassa ha sido la encargada de llevar a cabo el trabajo cuando todavía no se ha cumplido un mes desde que Quiteria fue llevada a Valencia para la reforma.

Esta campana, con un peso de 368 kg y 86 centímetros de diámetro, fue fundida en el año 1869, desconociéndose el nombre del fundidor. Es en la actualidad la de mayor tamaño del conjunto de tres existentes en la torre. 

No es la primera vez que la campana entra en talleres para una mejora. Hace seis años, a principios de 2016 fue enviada a la población belga de Holsbeek para ser reparada tras haber sufrido una grieta dos años ante cuando se realizó el volteo manual de las fiesta mayor del pueblo, la del Cristo, en septiembre de 2014. Una rotura que hacía que sonase muy mal y peligraba su integridad.

El cambio de yugo y cabezal de la campana mayor aportará un ritmo de volteo y un sonido menos metálico al bronce, más acorde con las características que tenía la campana cuando se fundió hace más de siglo y medio