El esperado regreso de los bous al carrer tras el parón de dos años por el covid escenificado en el primer encierro de cerriles de la Comunitat Valenciana que se celebrará el sábado en Almassora, donde se prevé una asistencia multitudinaria, ha desbordado a bares y restaurantes del municipio. La expectación es tal que la mayoría de los establecimientos hosteleros cuelga el cartel de completo para esa jornada con reservas, en algunos casos, desde hace más de dos meses. La hostelería ha sido uno de los sectores más afectados por la crisis derivada de las restricciones sanitarias y la jornada taurina y, en general, la semana de fiestas es recibida con los brazos abiertos por los hosteleros locales por el impacto económico que supone tras las pérdidas sufridas durante la pandemia.
Un ejemplo de ello es el bar La Picaora. «Va a ser una locura», manifiesta la dueña del establecimiento, Carla Sánchez, quien confiesa estar «un poco asustada» ante la masiva presencia de personas en la localidad el festivo autonómico. «Siempre hemos tenido muchas reservas, pero este año más y ya no cabe ni un alfiler, especialmente para los almuerzos, antes del encierro, pero también para las comidas y cenas de la jornada y para toda la semana de celebraciones», como explica Sánchez.
En términos similares se expresan desde Casa María. «La gente se lo ha tomado con muchas ganas y además de los vecinos del pueblo, tenemos reservas desde otros puntos de Castellón y de Valencia», explica la dueña del establecimiento, que cifra en más de 220 los servicios para ese día, «el más fuerte de las fiestas, junto al lunes».
El Bar Restaurante Caixa Rural Almassora también ha colgado el cartel de completo para las comidas y cenas del 9 d’Octubre. «Tenemos un salón grande y tenemos reservas desde hace dos meses, cuando ya se hablaba de que se podrían celebrar fiestas», apuntan.
Aficionados de toda la geografía española
El interés manifestado los últimos días con llamadas telefónicas al consistorio desde otras autonomías españolas como Navarra, Castilla la Mancha, Aragón o Andalucía, entre otras, ha provocado días antes del evento taurino situaciones inéditas en Almassora, como que en el pequeño Hotel Jendri tengan reservas para 8 personas llegadas desde Pamplona ex profeso, para disfrutar de la primera carrera taurina de la Comunitat Valenciana. Y es que el propietario del establecimiento hotelero asegura que «nunca antes» en un encierro del municipio había recibido visitantes de fuera.
Montaje de barreras y cadafals para los festejos taurinos
A escasos tres días del inicio de la programación taurina en Almassora, la Vila ha cambiado su fisonomía. Y es que las calles y plazas que dan forma al recinto taurino ya cuentan con las infraestructuras protectoras necesarias para el desarrollo de los ‘bous al carrer’, que arrancarán este sábado y se prolongarán hasta el sábado 16.
La afición disfrutará de 14 toros durante el Roser, uno más que antes del covid-19. A los seis astados de Fuente Ymbro del encierro se sumarán otros ocho ejemplares que se distribuirán durante la semana.
Plan de contingencia
Ante esta previsión de asistencia multitudinaria, la concejala de Fiestas, Isladis Falcó, recordó ayer en las redes sociales del Ayuntamiento las normas para evitar contagios por el covid en los espectáculos taurinos del Roser, como la obligatoriedad de llevar puesta la mascarilla en el recinto taurino, así como la prohibición de comer, beber y fumar en el mismo, y evitar aglomeraciones de gente, grupos o corrillos.
