El pasado lunes un hombre mediana edad resultó cogido por un toro embolado en el marco de las fiestas de agosto de Morella. El vídeo retrata en primera persona la imprudencia del varón que grabó con su propio teléfono su cogida. El toro embolado lo vio y él no hizo intención de correr hasta que fue demasiado tarde esquivar al animal.

El hombre que fue trasladado al hospital ya ha sido dado de alta. Durante la cogida recibió numerosos golpes y necesitó puntos para saturar una herida. Por fortuna, no resultó corneado y todo quedó en un gran susto.

Las autoridades y colaboradores taurinos recuerdan que este tipo de imprudencias, por desgracia muy habituales, son el origen de muchas de las cogidas que tienen lugar durante los festejos taurinos.