Según la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD), el cáncer de colon es el cáncer más frecuentemente diagnosticado en España. En nuestro país hay diagnosticadas unas 90.000 personas y es la causa de 11.215 fallecimientos anuales.

Se trata del segundo cáncer que más se da entre mujeres y hombres, después del cáncer de mama y próstata respectivamente.

La buena noticia es que este tipo de cáncer se puede curar en el 90% de los casos si se detecta precozmente. Por ello y con motivo del Día Mundial del Cáncer de Colon, que se celebra el 31 de marzo, los especialistas en aparato digestivo quieren recordar algunos elementos imprescindibles de la prevención de este tipo de tumores.

¿Qué es el cáncer de Colon?

Es uno de los cánceres más frecuentes, que comienza en el intestino grueso y que afecta a la parte final del tubo digestivo, que es el colon.

Habitualmente afecta a personas mayores de 50 años, aunque se puede manifestar a cualquier edad. Y lo más habitual es que comience por unos grupos pequeños de células no cancerosos llamados pólipos, que en algunos casos acaban derivando en un cáncer.

Los pólipos pueden ser completamente asintomáticos, y de ahí la necesidad de realizar pruebas de detección que puedan identificarlos y extirparlos antes de que se conviertan en un cáncer.

El cáncer de colon a veces se denomina cáncer colorrectal, que es un término que combina el cáncer de colon y el cáncer rectal, que comienza en el recto.

Factores de riesgo

Los principales factores de riesgo que pueden predisponer a desarrollar un tumor en el colon son:

• La edad: las probabilidades de padecer este cáncer se incrementan a partir de los 50 años.

• Los antecedentes familiares de cáncer colorrectal. Aumenta el riesgo cuando el paciente con cáncer es joven o cuando tenga familiares que hayan padecido esta enfermedad.

Haber padecido ciertos tipos de tumor u otras patologías digestivas como la colitis ulcerosa o la enfermedad de Crohn.

Síndromes hereditarios especiales.

Prevenir el cáncer de colón

Según la FEAD, los hábitos dietéticos y un estilo de vida saludables son importantes para ayudar a prevenir el cáncer colorrectal. Así que no está demás repasar algunos principios básicos para la prevención del cáncer de colon.

Reducir al máximo las grasas en nuestra dieta.

• Consumir frutas y verduras diariamente, así como cereales integrales, que contienen vitaminas, antioxidantes, fibra y minerales.

• Los alimentos ricos en calcio y vitamina D deben estar presente en nuestra alimentación.

• Es necesario evitar el sobrepeso. Y si ya lo tenemos, debemos hacer un plan con nuestro médico para adelgazar.

Nada de tabaco y mejor no tomar, o tomar muy poco alcohol.

Practicar ejercicio físico regularmente. Lo ideal sería hacer 30 minutos todos o casi todos los días. Con calma y al ritmo de cada uno. `pero al menos pasear es muy recomendable y muy beneficioso.

Qué es el cribado, y cómo se hace

Además de las medidas de prevención ya vistas, las pruebas de cribado del cáncer de colon son una herramienta fundamental a la hora de detectar la enfermedad en fases tempranas.

Por ello, «la prevención activa del cáncer de colon a través de los programas de cribado debe formar parte de los hábitos de salud de la población. Seguir los programas de cribado y acudir al médico ante la menor sospecha es fundamental para conseguir una detección precoz del cáncer de colon, ya que en esas circunstancias puede curarse en el 90 % de los casos, consiguiendo una reducción de la mortalidad y la incidencia» explica la doctora Mileidis San Juan Acosta, miembro de la FEAD.

Actualmente existen varias pruebas de cribado o screening para detectar lesiones premalignas o el cáncer colorrectal que aún no se ha manifestado. Las más practicadas son la detección de sangre oculta en las heces y la colonoscopia.

El test para la detección de sangre oculta en heces consiste en la recogida de una muestra de heces, con el fin de analizarlas y determinar si hay presencia de sangre en ella.

Si el resultado es negativo, indica que es muy poco probable que tenga cáncer de colon, aunque no es exacto al 100%. Por ello, se recomienda repetir la prueba anualmente y consultar al médico si aparecen molestias.

En el caso de un resultado positivo, lo único que significa es que se han detectado rastros de sangre, porque el origen puede ser variado y no siempre un tumor. Pero por precaución, la respuesta inmediata del médico será realizar al paciente una colonoscopia para confirmar el origen de esa sangre.

La colonoscopia es un procedimiento que explora el interior del colon y recto por medio de un endoscopio flexible que se introduce por el ano. El paciente es sedado para que el procedimiento no sea molesto y puede marcharse a casa una vez que han desaparecido los efectos de la anestesia.

¿Cuándo debo hacerme un cribado?

¿Debemos todos someternos a un cribado, aunque no tengamos antecedentes familiares? ¿y cuando debemos hacerlo?

Pues los especialistas en digestivo señalan diferencias en función de si tenemos antecedentes familiares o no, y según la edad.

Personas sin antecedentes familiares:

• Si no se hay casos de cáncer de colon en la familia y se tienen menos de 50 años, lo indicado es seguir hábitos de vida saludables (alimentación, no tabaco, actividad física regular).

A partir de los 50, la Fundación Española del Aparato Digestivo recomienda participar en los programas de cribado que estén en marcha en la autonomía donde vivamos.

Personas con antecedentes familiares:

• Si existe un solo un familiar de segundo grado (abuelo, tío) y la persona tiene 50 años o más, se aconseja participar en los programas de cribado de cada comunidad basados en la prueba de sangre oculta en heces. En el caso de que la prueba dé positiva se realiza una colonoscopia.

• Si existen dos familiares de primer grado (padre, hermano, hijo) o un familiar de primer grado menor 50 años, se recomienda consultar con el médico y generalmente adelantar el inicio del cribado a los 40 años, o 10 años antes de la edad de diagnóstico del familiar con cáncer más joven. Y a partir de ahí, hacer una colonoscopia cada 5 años.

Personas diagnosticadas de adenomas, enfermedades inflamatorias intestinales.

En estos casos, el especialista determinará el tipo de pruebas a realizar y la periodicidad de seguimiento.