la Guardia Civil ha investigado a 10 personas como presuntas autoras de ocho delitos contra la flora y fauna al ser sorprendidas cazando aves con la modalidad del parany, mientras que la Conselleria de Medio Ambiente ha abierto siete denuncias en Castelló relacionadas con este método de caza que, pese a gozar de gran tradición en la provincia de Castellón, está prohibido por la legislación.
80 aves muertas y 25 vivas
Los agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) rescataron 25 aves de distintas especies, como zorzales, curruca capirotada, jilgueros y mosquitero común, que fueron liberadas en el medio natural; y más de 80 ejemplares muertos, que fueron entregados a centros benéficos. Asimismo, se incautaron de un gran número de utensilios empleados en esta práctica ilegal, como varetas, perchas, reproductores electrónicos de sonido y altavoces.
Por ello, se instruyeron diligencias e investigación de 10 personas como supuestos autores de delitos contra la fauna y flora.
Mapping
Por su parte, los servicios territoriales de la Conselleria de Agricultura y Desarrollo Rural han llevado a cabo un mapeo de los emplazamientos del parany con una clasificación de su estado y posible uso. Estos últimos se localizaban en la demarcación de Sant Mateu, Segorbe y Vall d’Alba.
De la revisión efectuada se ha concluido que más de un 40% están abandonados y se han abierto siete denuncias en Castellón.
Estable con 202 paranys activos
Según fuentes cercanas al Comiteé Against Bird Slaughter, las denuncias van en la línea de las registradas en los últimos años, que se sitúan en una media de quince casos anuales --algunos años 12, otros 16, otros 17 y 18--. Según sus cálculos en estos momentos hay unos 202 activos en la provincia, donde se ha detectado signos de caza con varillas, cantando con reclamos o con estructuras podadas y con perchas para cazar. Llegó a haber alrededor de 3.000 instalaciones y en 2005 todavía se situaban en 900, señalaron.
La zona
Las tres principales zonas de actividad se sitúan entre l’Alcora-Onda-Betxí y Vila-real; la zona litoral de marjal de Almenara-Nules-Burriana y al norte, entre Càlig-Sant Mateu hasta Alcanar.
No obstante, señalan que en estos momentos la práctica está estancada por la falta de relevo generacional, por lo que no va a más pero tampoco a menos.
Difícil de detectar
Aun así, la persecución no resulta sencilla, si los árboles están en propiedades privadas u operan por la noche, y por los medios humanos y técnicos disponibles. Además, hay quienes mantienen el árbol cuidado pero sin cazar.
En qué consiste el parany
El parany consiste en una trampa para pájaros dispuesta en árboles donde se colocan unas perchas (maderas con hendiduras) a las que colocan unas varetas con una sustancia adhesiva (liga). Las aves son atraídas con reclamos electrónicos y al posarse sobre las perchas la liga se adhiere al plumaje y cayendo al interior del parany al no poder volar. Este método está prohibido y el colectivo está intentando que la Conselleria autorice estudios científicos para probar la selectividad del cesto malla y, a pesar de tener el aval del Tribunal Superior de Justicia, la Generalitat no los autoriza.
El Comittée Against Bird Slaughter es una organización no gubernamental con sede en Alemania que vela por la protección de las aves migratorias que en verano y primavera acuden al norte y centro de Europa a criar y que en otoño migran hacia el sur.
