Prisión de nuevo para un estafador con 13 condenas por falsos alquileres

El hombre publicaba ofrecía casas ‘fantasma’ en Castelló, Málaga, Pamplona o Madrid y cobraba reservas a los interesados, esfumándose después

Una policía frente a un ordenador, en imagen de archivo.

Una policía frente a un ordenador, en imagen de archivo. / MEDITERRÁNEO

CASTELLÓN

Cuatro años y tres meses de prisión y una multa de 3.000 euros es la pena impuesta por la Audiencia Provincial de Castellón a un estafador multirreincidente que se enriqueció a través de anuncios de alquileres fantasma. El hombre, que ya acumula 13 penas por hechos similares --dictadas por juzgados de Málaga, San Sebastián, Madrid, Pamplona, Canarias, Asturias etc..-- publicó diversos anuncios fraudulentos en internet, relativos a pisos ubicados por toda España. Entre estas localidades, figuraban Castelló, Alcalá de Henares, Leganés, Málaga y Pamplona, tal y como consta en la sentencia a la que ha tenido acceso este diario.

La Audiencia Provincial lo sentencia por un delito continuado de estafa, en concurso medial con uno continuado de uso de documento oficial falso, tal y como refleja la sentencia a la que ha tenido acceso este periódico.

Modus operandi

Colgaba los citados anuncio en conocidas plataformas de internet y aportaba un teléfono y número de cuenta bancaria para que los interesados realizaran la correspondiente reserva del inmueble. Obtenidas las transferencias, se apropiaba del importe, impidiendo tras ello el contacto con él por parte de las víctimas. Más tarde, comenzó también a pedir una copia del DNI a los interesados, así como también sus nóminas, teniendo acceso a un gran volumen de información personal y datos. Según señala el documento judicial, su intención era la de utilizar esos datos para seguir perpetrando defraudaciones económicas, identificándose ante posibles nuevos arrendatarios con esas identidades.

El procesado ha sido también sentenciado a devolver a las víctimas 2.880 euros, además de correr con las costas procesales.

El asunto del alquiler se está convirtiendo, de hecho, en una de las cuestiones que más preocupan a los ciudadanos hoy en día. Como publicó recientemente este diario, los precios no solo están imposibles en las grandes ciudades como Madrid, Barcelona o Valencia; sino que el aumento de los precios se deja notar de forma notable en capitales de provincia como Castelló, donde más de la mitad de las viviendas superan los 700 euros al mes. Precisamente, los estafadores se aprovechan de la elevada demanda existente e intentan colar estafas a los interesados con ofertas atractivas que generan reservas inmediatas. Lo mismo sucede, por ejemplo, durante el periodo estival, con los alquileres vacacionales. Los cuerpos de seguridad registran en verano denuncias cada día por alquileres fantasma de apartamentos en localidades costeras. Después de la reserva, los interesados no vuelven a saber nada más del anunciante.

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