SENTENCIA DE LA AUDIENCIA
Condena de prisión para el falso productor de 'porno' que abusó de una menor en Moncofa y le propuso hacer cine 'X'
La Audiencia le impone tres años y nueve meses por tocamientos y corrupción de menores
Tiene pendientes otras muchas causas, entre ellas por incendio de vehículos y está investigado por inducir a mujeres a poner denuncias falsas por violación

Vicente L.G., sentado en el banquillo de los acusados durante su juicio en la Audiencia. / MEDITERRÁNEO
Ya hay condena y puede ser la primera de varias. Tres años y nueve meses de cárcel es la pena impuesta por la Audiencia Provincial de Castellón para Vicente L.G. por los delitos de abusos sexuales y corrupción de menores, según la sentencia a la que ha tenido acceso este periódico. El acusado de hacerse pasar por director de películas pornográficas para convencer a una menor de 15 años de tener contacto íntimo en Moncofa tiene, además, múltiples causas abiertas en los juzgados de Castellón y otros de España, por lo que esta podría ser la primera sentencia condenatoria, pero no la única.
En el apartado de la responsabilidad civil, deberá pagar a la víctima 3.350 euros, así como las costas procesales, incluidas las de la acusación particular. Tras su salida de prisión, pasará tres años en libertad vigilada y no podrá acercarse a menos de 400 metros de la afectada.
Los hechos sucedieron en julio del 2021. El tribunal declara probado que Vicente L.G., exdetective privado de 40 años, se encontraba en una playa de Moncofa, a bordo de un Audi A7, propiedad de su madre. La menor tenía problemas para sacar su moto, encallada por la arena, y el adulto se ofreció a ayudarla.
Vicente L.G. le pidió unas indicaciones a la adolescente y dijo no entenderlas para que ella lo guiara. Ella aceptó "en contrapartida" por la ayuda que él le había prestado previamente. Una vez en el destino, una zona apartada, comenzó a hacerle "preguntas íntimas". La Audiencia declara probado que la menor se separó de él, se sintió incómoda y sintió que no podía irse de allí. "El hombre empezó a decirle que era director de cine para adultos, que ganaba mucho dinero y le ofreció 1.000 euros si accedía a rodar una película en una playa nudista", señala el documento judicial.
Le cortó el paso
Los magistrados dan credibilidad al testimonio de la víctima y determinan que quedó "atrapada" entre el vehículo del adulto y las propias piernas de este, que atrajo a la menor hacia él y comenzó a manosearla. Dice la sentencia que el acusado le subió la falda, le tocó las nalgas en dirección a sus partes íntimas e intentó bajarle la braga del bikini. También afirman los jueces que el agresor sexual le preguntó a la menor si había tenido sexo antes, le dijo que él le "enseñaría" y se bajó el pantalón, tratando que la adolescente le tocara sus partes.
Finalmente, la niña pudo escapar, llegando Vicente L.G. a "cortarle el paso".
La Audiencia da credibilidad y versosimulitud al testimonio de la víctima y pone en valor el testimonio "de testigos directos y no de referencia del estado en que estaba la adolescente tras los hechos".
El aspecto físico
La sentencia destaca que la menor reconoció al acusado y lo identificó en sala. Respecto a las divergencias sobre el aspecto físico alegadas por la defensa, el tribunal señala que el color de los ojos se puede modificar con lentillas (como sugirió la Fiscalía) y el color del pelo, cambiar por el paso del tiempo. De hecho, la menor recordó que el agresor llevaba coleta en el momento de los hechos, como así era, pese a que se presentó con cabello corto al juicio.
Los jueces determinan que el procesado ha dado dos versiones distintas sobre los hechos y que ninguna de ellas está sustentada ni sirve de coartada. "El testimonio de la joven y el resto de testificales y periciales constituyen prueba de cargo sólida y suficiente", concluyen.
Tal y como ha podido constatar este diario, el procesado, Vicente L.G., figura también como investigado en una causa del Juzgado de Instrucción 3 de Castellón por un presunto delito de incendio, ocurrido en su propio garaje y en el que, supuestamente, coaccionó a una mujer (ella misma lo admite) para que provocara el fuego en ocho turismos a raíz de disputas vecinales.
Más causas
El susodicho, vecino de Benicàssim y de 44 años, también habría, supuestamente, acosado y vigilado a una camarera de Castelló durante meses. Cuando esta y su marido le llamaron la atención, sufrieron el incendio intencionado de tres coches de su propiedad. Por si este hecho no fuera de por sí llamativo y sospechoso, una segunda mujer interpuso una denuncia falsa contra el marido de la primera por una presunta agresión sexual. Finalmente, la propia denunciante reconoció que las acusaciones eran falsas y señaló a Vicente L.G. como la persona que la había incitado a hacerlo.
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