Una niña acusa a su padrastro: «Me tocaba, besaba y quitaba las sábanas»

Un vecino de Castelló, de nacionalidad rumana, se ha sentado este jueves en el banquillo de la Audiencia Provincial para responder por las acusaciones de agresión sexual a su hijastra de once años de edad y corrupción de menores. 

La Fiscalía pide para él 12 años de prisión por unos hechos que él negó ayer ante el tribunal. «Nunca la toqué ni le di besos y si le di dinero fue, como a mi hijo, para que se compraran algún regalo o fueran a por el pan o al bazar chino», ha mantenido el acusado, con la ayuda de un intérprete de rumano.

En referencia a un episodio concreto en el baño, mientras la menor estaba en la ducha, dijo que entró «un momento», «por una urgencia» y con el permiso de la madre, sin ver a la niña desnuda.

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Declaración de la niña

La declaración de instrucción de la víctima se ha reproducido en la sala para evitar que la menor tuviera que volver a pasar por ese trago. «Me tocaba los pechos, me daba besos en la boca y me quería quitar las sábanas cuando estaba dormida. Pasaba cuando mi madre estaba trabajando o dormía», dijo la perjudicada, quien también incidió en que ella le repetía «que parara y que se fuera». 

Respecto al episodio del baño, la menor contó que el hombre entró en el aseo y se quedo «cinco o diez minutos», sintiéndose ella violentada y asustada. «La cortina era traslúcida y cuando se fue me dijo que me veía bonita», relató la denunciante en fase de instrucción.

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La madre de la niña también ha declarado como testigo y ha recordado que se separó cuando se enteró de los presuntos abusos. «Me contó, muy nerviosa y llorando, que entraba en su habitación y la tocaba», ha explicado la progenitora, quien negó haberle dado permiso para entrar el en servicio cuando la menor se estaba duchando. Asimismo, la madre ha confirmado que el acusado llegó a llamarla en múltiples ocasiones para pedirle que retirara la denuncia antes del juicio.

Acción educativa

En la vista han declarado también la orientadora escolar del instituto al que iba la víctima y la vicedirectora. A la primera le confesó la niña lo que sucedía en su casa. «También me dijo que le había ofrecido dinero para irse con él a la cama. Estaba muy asustada», ha aseverado la profesional educativa a preguntas del Ministerio Fiscal, destacando también que «el abrazo que se dieron madre e hija tras contar la menor lo que sufrió fue liberador».

La vicedirectora ha recordado que, una vez tuvieron conocimiento de los hechos, lo notificaron a los Servicios Sociales y a la Fiscalía Provincial, además de dar aviso a la madre de la perjudicada.

El juicio ha quedado visto para sentencia en la Audiencia.