Multa y retirada de carnet para dos conductores ebrios de Orpesa y Onda

Pese a las numerosas campañas de concienciación, al carnet por puntos y a los gravísimos riesgos de conducir bajo los efectos del alcohol o las drogas, la Justicia dicta de forma continua resoluciones contra conductores que deciden poner su vida y la de los demás en juego.

Los tribunales castellonenses han condenado a dos hombres que fueron sorprendidos en Orpesa y en Onda circulando ebrios y que, además, causaron sendos accidentes de tráfico. 

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Según detalla la primera de las sentencias, a la que ha tenido acceso este periódico, los hechos sucedieron durante el verano del 2016, cuando el ya sentenciado iba al volante de un Mercedes S40 por la nacional 340, a la altura de Orpesa y estando bajo la influencia de la previa ingesta de bebidas alcohólicas que le incapacitaban para la conducción en condiciones de seguridad. Esta circunstancia provocó que, al llegar al punto kilométrico 999,300, tomara la línea de servicio de salida por el carril contrario y colisionara frontalmente contra un BMW.

Personados agentes de la Guardia Civil, el procesado fue requerido para someterse a las pruebas de alcoholemia, arrojando un resultado positivo de 0,73 mg/l .

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Aunque los hechos sucedieron en 2016, no fueron enjuiciados hasta el año 2023 (siete después), por lo que el acusado se ha beneficiado de una atenuante de dilaciones indebidas. Finalmente, ha sido sentenciado a una multa de 10 euros al día durante cuatro meses (1.200 euros), a la retirada del carnet de conducir durante ocho meses y al pago de las costas.

El caso de Onda

Otro conductor que dio una tasa idéntica 0,73 mg/l ha sido también procesado y condenado por un delito contra la seguridad vial en Onda. En este caso, el acusado circulaba por la calle El Molí de la localidad de Onda a finales de marzo del 2020, en pleno confinamiento por el estado de alarma derivado del coronavirus. 

En una curva, perdió el control del vehículo y colisionó con la parte trasera del vehículo Ford Fiesta que se encontraba estacionado. A consecuencia del golpe, ese turismo fue desplazado hacia adelante, golpeando a su vez con un Ford S Max, también aparcado allí.

El procesado siguió circulando, pero se quedó en el lugar su hermano, que circulaba tras él en una motocicleta y vio el accidente.

Una patrulla de la Policía Local acudió al lugar, alertada por un vecino, identificando al hermano del fugitivo, quien explicó que éste se había ido. A petición policial, le convenció de que regresara al lugar, donde dio positivo. Ha sido condenado a una multa de 1.680 euros y a la retirada del carnet durante un año y tres meses.

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