Contra viento y marea. 10.200 castellonenses llevan dos años o más buscando empleo, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) más reciente, que muestra una radiografía de la situación sociolaboral. La mayoría de estos parados de larga duración son mujeres (el 60%, 6.300). A este colectivo que recibió el 2021 con más dificultades para hallar trabajo le sigue otro grupo, de 8.300 personas, que acumulan uno a dos años con ese objetivo. Otros 18.200 llevaban dedicados menos de un año y 2.700 declaraban haberlo encontrado.

El 2020 fue además un año atípico por la pandemia, que estalló a mediados de marzo con el estado de alarma, confinamiento y restricciones. El paro de larga duración, lejos de descender, aumentó en la provincia un 20% interanual. Periodos con menos entrevistas, otras on line, menos trabajo extra en comercio y hostelería. Y el desánimo. Y los ERTE. Todo ello ha impactado en una ya de por sí complicada tarea.

¿Cuáles son los perfiles?

En las ETT siguen de cerca los esfuerzos diarios de la población castellonense en desempleo. Desde Grupo Noa’s, su CEO Adela Pérez explica que es más complicado encontrar empleo «para mujeres, con baja formación y mayores de 50 años. Muchas trabajan como encajadoras durante la campaña de cítricos, pero cuando terminan no es fácil encontrarles otros trabajos». 

La delegada de Adecco en Castellón, Pilar Trilles, opina que para encontrar trabajo son un hándicap «los perfiles con baja formación y poca experiencia». Otro colectivo perjudicado «notablemente» son los mayores de 25 años, y los más jóvenes, aunque «este último grupo ha mejorado en este 2021, por refuerzos que han precisado empresas de industria, química, logística o transporte para cubrir puestos básicos industriales, técnicos, oficiales de primera, ingeniero júnior y administrativos comerciales con ganas de formarse en la empresa», agregó. Para Trilles, «la formación maximiza las oportunidades. Incluso para puestos básicos, las empresas nos solicitan un plus formativo que diferencie entre candidaturas: valoran estudios de ESO, ciclo formativo, ofimática básica, manejo de maquinaria, buena actitud y ganas de aprender».

Francisco Sacacia, representante de UGT en Castellón, incidió en que la franja más afectada por el paro de larga duración «son mayores, de 50 años o más, que salen del mercado laboral por un ERE o prejubilación». Opina que «es un tema a solucionar porque son los profesionales con más experiencia y responsables. Es pasar de 50 y no los valoran. Las empresas están perdiendo un activo muy importante». Y Albert Fernández, líder de CCOO en Castellón, apuntó a la falta general de creación de empleo, aunque «quizás ahora repunte algo la contratación».

Cruz Roja lo vive «en primera persona»

MUJER DE 49 AÑOS: «Estudio para poder acceder a trabajar en un supermercado»

 Inmaculada tiene 49 años y lleva más de un año, desde marzo del 2020, sin trabajar. Separada con un hijo (que ya es mayor, de unos 20 años), no tiene estudios pero sí una amplia experiencia en el sector de comercio y atención al cliente. Participa en el programa Desafío+45, impulsado por Cruz Roja Castellón para ayudar a encontrar trabajo en esta franja de edad más problemática. «Actualmente, estoy realizando el curso de Servicios Polivalentes de Comercio, dado que creo que puede abrirme nuevas oportunidades de empleo en supermercados, un área nueva», manifiesta tanto ella como los técnicos que la asesoran en este camino. Cree que su edad es valorada «muy negativamente» por el mercado laboral, pero no pierde la esperanza. Tiene claro que, con sus competencias personales y profesionales, y reciclándose, ampliando sus conocimientos y formación va a conseguir encontrar su lugar.

LOS 'NI NI': "Hemos formado a jóvenes que ni estudian ni trabajan»

Cruz Roja Castellón atendió con su Plan de Empleo durante el 2020 a 2.492 mujeres y 1.339 hombres. «Atendemos a los más vulnerables, a colectivos que precisan medidas más específicas, desde mujeres mayores de 45 años a víctimas de violencia de género, inmigrantes o jóvenes en riesgo de exclusión», explicaron. Una de cada diez usuarias fue parada de larga duración. «El colectivo de mayores de 45 años (que supone un 12% de las personas atendidas) pudo mejorar sus oportunidades de acceso al mercado laboral a través de la mejora de sus competencias y cualificación profesional. En el 2020 se ha alcanzado la inserción del 44% de las personas que han participado», indicaron. «De los jóvenes que ni estudiaban ni trabajaban (ni ni) y participaron en los talleres de Cruz Roja Provincial, más de la mitad se ha formado en una profesión y ha podido encontrar trabajo tras capacitarse un 48%», resaltaron.