Las solicitudes de profesionales y empresas de Castellón, presentadas ante la Oficina Española de Patentes para proteger productos, invenciones y marcas, se mantienen con una tendencia ligeramente al alza en patentes y en inventos. En este último apartado de invenciones, se solicitaron 20 en el 2020 frente a los 15 del año anterior. Sin prisa pero sin pausa, en este primer trimestre se han gestionado ya ocho peticiones.
La industria cerámica juega un papel preponderante entre los sectores donde surgen estas nuevas ideas exclusivas a proteger (desde esmaltados fotoluminiscentes a sistemas de hornos o nuevos expositores), si bien también escalan posiciones, enmarcado en la crisis del coronavirus, los productos de textil-sanitario, como mascarillas con filtro especializados o accesorios. Logística, vehículos o tecnología --como un sistema de pago seguro o un tipo de soporte especial para teléfono móvil-- constituyen otros de los productos protegidos en la provincia.
Dos patentes más
Desde la Oficina Española de Patentes y Marcas se gestionan otro tipo de expedientes, además de los inventos. Así, en patentes nacionales en Castellón se registraron 18 productos el pasado ejercicio (16 en el 2019 y seis en lo que va del 2021). Es una actividad innovadora muy a la zaga de Girona (con 19 anuales), Pontevedra (16) o León (17). Pero Castellón, respecto a Alicante (61) o Valencia (152), se queda muy atrás, a la cola en la Comunitat.
Además de patentes e inventos, esta oficina estatal también protege, en otras categorías, diseños industriales made in Castellón (18 en el 2020) y modelos de utilidad (48). Pero, sin lugar a dudas, el mayor volumen de expedientes hace referencia a las marcas nacionales: durante el pasado ejercicio, en la provincia se tramitaron 438, unas ocho por semana; y de enero a marzo de este 2021 ya se alcanzan las 148 (lo que supone un ritmo de 12 por semana).
Le siguen en importancia los nombres comerciales, con más de un centenar de peticiones (118 en la última anualidad y 42 este año). En conjunto, sumando expedientes gestionados, son más de 600 y prácticamente la misma cifra en los dos últimos años, lo que da idea de un marco estable.
Lanzapiensos, camiseta para surf, minicuna convertible o nueva tijera
Castellón ha tramitado la patente de 3.794 inventos en toda la serie histórica registrada en la base de datos Invenes de la Oficina Española de Patentes y Marcas, que arranca en los años 40. Las más recientes, eso sí, de los últimos tres años, recogen curiosidades como un mecanismo lanzapiensos de alimentos para mascotas, una camiseta protectora para la práctica de surf o una minicuna-balancín que se convierte en escritorio o asiento. Un sillín portaobjetos para bicicleta o una nueva tijera perfeccionada son otros ejemplos, junto con el jabón potásico puro de una empresa especializada y de gran tradición en la provincia castellonense. La logística también se beneficia de las invenciones, con un vehículo tipo ciclo con elementos integrados para recoger, elevar y depositar cargas. O un sistema higienizador de manos para las manillas de las puertas, mascarilla con doble compartimento o un dispositivo removedor de cama avícola autopropulsado.
Industria cerámica y CEEI
Desde el Instituto de Tecnología Cerámica (ITC), muy activo en I+D+i, trabajan en un sinfín de proyectos confidenciales. Con todo, destacan las patentes más recientes concedidas, como una de ámbito científico, con aplicación sanitaria. «Se han diseñado y protegido unas esferas de vidrio con un recubrimiento de plata que tienen acción biocida en el agua, que son útiles en ambientes sanitarios», explican. Asimismo, señalan que «se ha publicado en el Banco de Patentes de la Comunitat y protegido el diseño de CERIA, «el expositor inteligente que se presentó en Cevisama 2020». Son dispositivos y máquinas, nuevos desarrollos tecnológicos, «que ya se están aplicando en empresas».
Con todo, desde el ITC recordaron «patentes más antiguas, pero muy importantes, cara a la automatización y mejora del proceso de fabricación e industria 4.0». Como ejemplo, citaron, «el densexplorer (nueva tecnología para medir la densidad aparente de las baldosas cerámicas, lo cual da una indicación temprana sobre la calidad de la pieza) y los sensores de humedad (una tecnología que permite el control de la humedad a la salida de una prensa cerámica o para atomizadores)».
En el Centro Europeo de Empresas Innovadoras (CEEI) de Castellón forman en patentes a emprendedores que puedan necesitar esta gestión. Con todo, muchos recurren a abogados o asesores, incluso de Valencia o Barcelona. Un reciente informe del CEEI sobre empresas tractoras de la Comunitat resaltó que el registro de patentes «es más intenso en el sector químico, superior al cerámico, y muy escaso en servicios».
Historia: Primera patente en 1942
Casimiro Meliá Tena (Albocàsser, 1902 - Castelló, 1991) fue el primer castellonense en solicitar, el 31 de marzo de 1942, una patente para proteger su invención: un sistema de perfeccionamiento en hogares de gasógeno. En los registros de la Oficina Española de Patentes y Marcas consta que se le concedió la protección de su innovación el 1 de abril de 1943. Se percibía, según el informe, como «una novedad industrial con características y ventajas que la hacen merecedora del privilegio de explotación exclusiva que por ella se solicita». ¿Qué supuso esta innovación de la época? A la larga, ese sistema de combustión se aplicó en el transporte y la automoción.
