Elena Adelantado y Remedios Bravo son dos castellonenses que han sido tratadas con un nuevo tratamiento contra el cáncer de mama, y que han logrado curarse de sus respectivos tumores. Dos ejemplos de superación que invitan al resto de mujeres que tengan la posibilidad de someterse a este proceso.

Este ensayo, promovido por el grupo cooperativo estadounidense Swog Cancer Research Network, con el apoyo del National Cancer Institute de EEUU, cuenta con participación del Grupo Geicam de Investigación en Cáncer de Mama, que ha contribuido al mismo con la inclusión de 792 mujeres, lo que supone casi el 20 % de pacientes participantes, a través de 21 hospitales españoles.

En Castellón, la unidad de cáncer de mama recibe cada año a unas 270 pacientes nuevas, de las cuales se calcula que el 15 o 20% tendrían entre uno y tres ganglios axilares. De ellas, se aplicaría este tratamiento a las que se encuentran en edad posmenopáusica, por lo que se estima que anualmente serían unas 30 mujeres.

Los testimonios

Elena Adelantado es una vecina de Castelló que con 47 años le detectaron un cáncer de mama. La noticia, según relata, fue «demoledora»: «Tras diagnosticarme el tumor, lo analizaron y tuvieron que quitarme el pecho. Me hizo súper feliz que me tocara el tratamiento sin quimioterapia, porque lo había sufrido con mi madre y sabía lo duro que era, aunque también te quedaba la duda de si se iba a reproducir más rápidamente».

"Tenía miedo de volver a pasar por lo que viví con mi madre por la quimio"

Y explica: «Nos daban una pastilla diaria, que todavía me tomo, y ha ido todo genial, lo que demuestra que es un avance fundamental para el futuro».

Elena Adelantado atiende a Mediterráneo en el Hospital Provincial de Castelló. SERGI JUAN PEIRÓ

Nació en Córdoba, pero lleva toda la vida viviendo en Castelló. Remedios Bravos es otro de los rostros que cuenta el éxito de este ensayo: «Cuando me lo ofreció el doctor me surgieron muchas dudas porque era un tratamiento que todavía estaba en estudio y tienes el miedo de si va a salir bien».

"Sabía que era una oportunidad de ayudar a la ciencia y a las mujeres"

No obstante, explica que «era una oportunidad de ayudar a la ciencia y el resultado ha sido maravilloso. La quimio es un tratamiento muy fuerte que tiene muchos efectos secundarios, a mí me dijeron que igual me afectaba un poco a la vista, pero ha ido todo el proceso sin problemas».

Remedios Bravo atiende a Mediterráneo en el Hospital Provincial de Castelló. SERGI JUAN PEIRÓ