Madrileños, vascos y catalanes ya tienen reservado su apartamento para pasar el verano en la provincia de Castellón. Inmobiliarias y agencias especializadas en alquiler turístico confirman que, a dos meses vista de la campaña fuerte (julio y agosto), ya registran una demanda superior al año anterior, marcado más si fuertemente si cabe por el covid-19. Otro hecho diferencial es la duración de las estancias, más largas. Se contratan ya no solo de una semana, sino que se generalizan las dos semanas y en algunos casos incluso tres, un auténtico récord para el sector.

El anuncio del cierre perimetral de la Comunitat a partir del 9 de mayo y el avance de la vacunación parece haber reactivado las ganas de salir de vacaciones, pese a toda la incertidumbre que envuelve a la pandemia. Desde el sector apuntan que otro factor que favorece que se haya animado la demanda es la política de cancelación, con gasto cero en muchos casos o especificada en hasta 48 horas antes de la llegada prevista.

«Es increíble; llaman a diario»

La costa norte es una de las más requeridas. En Alcossebre, desde la inmobiliaria con más de 40 años de experiencia con Rafael Albert al frente, este apunta que «hay mucho interés en alquilar vivienda vacacional, es increíble, todo apunta a que será una de las mejores campañas en años. Nos entran reservas cada día y, por supuesto, más que hace un año». La tendencia de estos turistas que buscan apartamentos o chalets es planificar su viaje de cara al mes de junio. «Hacia finales de junio es cuando siempre ha venido el turismo nacional, cuando empiezan las vacaciones escolares», explicó, al tiempo que puntualizó que precisamente por las circunstancias del covid apenas esperan turismo extranjero, pues «solían venir franceses e ingleses en mayo, por lo que la campaña, aunque será más intensa, será más corta, desde junio a septiembre».

Las solicitudes se esperan de más duración, pues «antes, lo habitual era un apartamento para una semana;y ahora, se pide la quincena, o incluso hasta tres semanas». Además, muchos aprovecharán la estancia para decidir si compran una segunda residencia, «según nos dicen; el verano pasado, con el efecto del covid, fue uno de los de más ventas».

Juan A. Beltrán (Peñíscola): «Nuestro perfil de turista es nacional. Viene de Aragón, País Vasco, Madrid y Cataluña»

Seguridad frente al covid

En Peñíscola, el responsable de una empresa de alquiler vacacional, corrobora que las reservas «se están animando de cara al verano». ¿Cómo ha impactado el covid-19 en los requerimientos para una vivienda de vacaciones? «Lo que se pide es seguridad sanitaria: que los apartamentos estén debidamente higienizados, se quieren asegurar de que las piscinas estarán en funcionamiento --aunque entienden que con restricciones-- y, sobre todo, quieren conocer todos la política de cancelación». En su caso, la mayoría planea quedarse siete noches, «pero lo cierto es que están entrando bastantes solicitudes para 14 noches;sí que estamos notando que las pernoctaciones de las nuevas reservas son más largas de lo habitual».

Apartamentos con el cartel de 'Se alquila', en Peñíscola MARÍA JOSÉ SÁNCHEZ

¿De dónde proceden los visitantes que se han adelantado ya a formalizar reservas? «En nuestro caso, en Peñíscola, sigue siendo el perfil habitual:mayoritariamente es un turista nacional, que proviene de Aragón, Navarra, País Vasco, Madrid y Cataluña. Sobre si los precios se mantienen, en general, desde el sector inmobiliario y vacacional apuntan que sí. Aunque también influye en la tarifa el número de personas que se puedan alojar, precisamente, ahora, muy marcado por lo que dicten las normas sanitarias respecto a las unidades de convivencia que pueden tomar contacto en una misma residencia.

Rafael Albert (Alcossebre): «Tenemos muchos turistas que este verano alquilarán, pero con intención de comprar»

Casas con piscina

Para evitar al máximo las posibilidades de un contagio de coronavirus, es cierto que también existe un sector importante de la demanda turística que puede permitirse y busca villas con piscina o adosados con su parcela de jardín o zona de juegos.

«Se valora que el uso sea más individual», apuntaron profesionales del sector inmobiliario de la provincia. En definitiva, se trata de un colectivo que prefiere pasar un tiempo de asueto más relajado, aislado y con un uso más privativo de la piscina, «frente al uso compartido o con mayores restricciones que pueda tener la piscina de un bloque de apartamentos costeros».

Precio orientativo

Los profesionales del sector inmobiliario apuntan que este verano los precios de alquiler, por su parte, se mantienen. Sin embargo, habrá que esperar a conocer el informe habitual de los tasadores de Tecnitasa para poder precisar. En internet hay anuncios de apartamentos con vistas al mar por 850 euros la semana, aunque siempre hay promociones.

"Los propietarios alquilan menos"

Moncofa es otro de los puntos, pero en el litoral sur de la provincia, referente en el arrendamiento de apartamentos muy próximos a la playa para pasar las vacaciones de verano. Desde una inmobiliaria que gestiona alquileres en la zona marítima, el agente colegiado José Ferrando explica sobre las perspectivas cara a esta temporada que «la gente está buscando apartamentos con piscina para venir los meses de julio y agosto», detalla. 

La mayoría de demanda es de ciudadanos de la propia Comunitat. Y en cuanto a los precios previstos para aplicar, continúan «igual», sin cambios respecto a la campaña del verano del 2020, tan atípico con motivo de la crisis sanitaria que arrancó en marzo, y tras un periodo de estado de alarma con confinamiento domiciliario. En todo caso, Ferrando sí apunta a otra peculiaridad para esta temporada estival: «La oferta en alquiler es menor, puesto que muchos propietarios no van a arrendar. Con el contexto del covid, los jubilados de otras zonas de España, propietarios, alargaron la estancia y se han quedado más meses en el apartamento».