"Iniciamos un tiempo de apertura progresiva que no tendrá marcha atrás por la vacunación". De esta forma el president de la Generalitat, Ximo Puig, dio el pistoletazo de salida en un solemne discurso institucional a la nueva etapa en la pandemia de covid-19 en la Comunitat Valenciana, motivada por el fin del estado de alarma después de seis meses "de esfuerzo colectivo para frenar el virus, sufrimiento por las personas que perdían la salud y orgullo valenciano por lo que hemos conseguido juntos".
Un nuevo escenario caracterizado por la relajación en las medidas restrictivas, conocidas muchas de las nuevas a lo largo de la última semana ante el cambio normativo que ha introducido al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana en la ecuación de la crisis. Uno de los cambios clave y más ansiados es el fin del cierre perimetral de la autonomía: "Prometí que esta medida no duraría ni un día más de lo necesario y así será", destacó Puig.
"Normalidad casi plena"
La mayor movilidad nocturna y la ampliación de las reuniones sociales o los aforos y el horario en hostelería completan a grandes rasgos la modificación de las restricciones que pretenden empujar la recuperación económica, social y emocional. "Son avances que impulsarán la actividad de miles de negocios y nos retornan a un estado de normalidad casi plena", apuntó el president, sin dejar de insistir en que "el virus sigue ahí y la prudencia tiene que ser la medida protectora fundamental".
El modelo valenciano
Ahora bien, también hubo momento durante el parlamento para reivindicar el modelo valenciano en la gestión de la pandemia tras semanas con el foco centrado en las elecciones de Madrid. Y lo hizo aludiendo al "orgullo", la ausencia de "enfrentamientos y crispación" o la "fortaleza" en la crisis. Pero además el dirigente aprovechó para sacar a relucir datos como los de incidencia, pues "somos el territorio más seguro de España desde hace dos meses", o de hospitalizaciones y casos, "en niveles de agosto".
"Aquí en la Comunitat Valenciana nadie ha discutido nunca qué vale más, si una cerveza o una vida"
Puig consideró incluso a la autonomía "una referencia europea", aunque todo ello quedó resumido en una única afirmación: "Aquí en la Comunitat Valenciana nadie ha discutido nunca qué vale más, si una cerveza o una vida".
Ahora bien, el jefe del Consell se mostró consciente de las renuncias realizadas "por un bien superior como salvar la vida de muchísima gente", sin evitar mostrar el "hartazgo" generalizado hacia la pandemia y recordando tanto a las víctimas de la enfermedad, como las acciones de cada uno de los ciudadanos, desde "la alegría responsable de los niños", hasta las acciones de los más mayores.
Verano
La senda iniciada hoy mismo apunta pues hacia "un verano que necesitamos tanto como respirar" y "en términos económicos" en el que se pueda materializar esa triple recuperación con la vacunación como principal aliado contra los retrocesos después de administrar más de dos millones de dosis en la autonomía: "La previsión inmediata es esperanzadora, pues a final de mes estarán vacunados todos los mayores de 60 años y a lo largo de junio todos los de 50", detalló Puig.
De esta forma, para el president se inicia un "nuevo tiempo" de camino a restablecer la ansiada normalidad real previa a la irrupción del coronavirus, según declaró en un discurso con un ojo puesto en el pasado y los sacrificios, pero también en el porvenir y la actitud de la ciudadanía a lo largo de todo este periodo excepcional: "Te necesitaba tu pueblo y tu pueblo está orgulloso de ti", concluyó.
