Los teléfonos de las recepciones de los establecimientos turísticos y las webs de los hoteles evidencian que con el fin del estado de alarma y de las restricciones a la movilidad y el avance de la vacunación, las reservas de vacaciones se animan. Hay ganas de viajar y en localidades como Peñíscola, Alcossebre, Orpesa o Moncofa se empieza a librar una batalla fraticida para atraer a cuantos más visitantes mejor. La temporada estival a la vuelta de la esquina, el sector sabe que se la juega y hoteles y restaurantes de la costa han empezado ya a buscar profesionales. El problema es que este año lo van a tener más difícil que nunca, ya que en los últimos meses decenas de camareros, cocineros o recepcionistas han abandonado el sector y ahora tienen un empleo en la cerámica o la construcción por lo que a hoteles y restaurantes les toca empezar de cero.

Un solo vistazo a los principales portales de internet basta para comprobar que la demanda de cocineros, recepcionistas o personal de mantenimiento de hoteles y restaurantes de la playa es altísima. «Nosotros buscamos a 23 personas para cocina, barra, terraza, vigilancia o mantenimiento y ofrecemos la posibilidad de trabajar a media jornada, a jornada completa o extras en fines de semana. Lanzamos la oferta el viernes y ya nos están llegando currículos», afirman desde el chiringuito Dharma Playa, en el Pinar de Castelló, que empezará la temporada el próximo 11 de junio.

En busca de candidatos

A los empresarios del sector turístico les empiezan a llegar los currículos y esta temporada van a necesitar muchos más. Si hoteles y restaurantes se las ven y se las desean todos los veranos para encontrar profesionales, este 2021 será todavía más complicado. «Nos encontramos con el problema de que muchos hoteles y restaurantes de Castellón han perdido tanto trabajadores fijos-discontinuos como asalariados temporales que estaban en nuestras bolsas de trabajo. Todos estos profesionales, dadas las circunstancias, han optado por buscarse la vida para conseguir más meses de empleo y se han recolocado en otros sectores, dado que la temporada 2020 fue supercorta, y la del 2021 ha arrancado más tarde de lo que hubiéramos deseado y pensado», apunta Francisco J. Ribera, presidente de la asociación de empresarios turísticos Agretur, y director del Gran Hotel Peñíscola.

La inmensa mayoría de los empresarios de la industria turística buscan ya candidatos para reponer la fuga de profesionales que ha vivido el sector y algunos hoteles y restaurantes han contactado con entidades formativas para acoger alumnos en practicas a partir de este mismo mes o de principios de junio. «Lo que queremos es formarlos según las propias necesidades de cada negocio, con la idea de que cuando acaben sus prácticas puedan ser directamente contratados para cubrir vacantes y puntas de faena por las empresas que los tuvieron previamente en prácticas», dice Ribera. 

Si la crisis del 2008 se llevó por delante gran parte del empleo de la construcción, la pandemia se ha cebado con el sector servicios en general y la hostelería en particular. A principios del 2020, hoteles, bares y restaurantes empleaban en la provincia a 17.534 personas. En enero de este año, la cifra se había reducido a 15.711 (un descenso del 10,4%). O lo que es lo mismo: en un año el sector ha destruido 1.823 puestos de trabajo, según cifras de Turisme Comunitat Valenciana. Y los números podrían ser mucho peores de no mediar los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).

12.000 contratos en tres meses 

Hoteles y restaurantes tienen muchas vacantes por cubrir, y los empresarios van a mirar con lupa cada euro que gastan. «Estamos en números rojos, así que vamos a tener que hilar muy fino para intentar recuperar todas las pérdidas que llevamos acumuladas», explica Juanjo Medina, presidente de Ehosbe, la asociación de empresarios de hostelería de Benicàssim.

El turismo ya calienta motores y la sensación general, por primera vez en meses, es de optimismo. «Pensamos que este verano será buenos, incluso mejor que el año pasado», aventura Medina. Traducido en empleo, significa que en los próximos meses es muy probable que el sector supere las 12.000 contrataciones en Castellón.