La Generalitat valenciana no quiere por nada del mundo que se repitan en la Comunitat las imágenes de botellones y fiestas multitudinarias que se sucedieron en Madrid, Barcelona o Salamanca la madrugada del pasado domingo con motivo del fin del estado de alarma y el toque de queda. La preocupación es máxima y este fin de semana es de alto riesgo: será el primero completo sin cierre perimetral en muchos meses, con el toque de queda retrasado a las 0.00 horas y con la hostelería abierta hasta las 23.30. Y para evitar  aglomeraciones, el Consell reunió ayer a una treintena de alcaldes y alcaldesas de las localidades más turísticas para pedirles que convoquen cuanto antes las juntas locales de seguridad y ofrecerles «colaboración» para impedir cualquier exceso no permitido.

Al encuentro, que se realizó de manera telemática, acudieron munícipes y concejales de siete localidades de la provincia: Castelló, Vinaròs, Benicarló, Peñíscola, Orpesa, Benicàssim y Burriana. A todos ellos tanto el president de la Generalitat, Ximo Puig, como la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, les pidieron que acentúen el control y la vigilancia del cumplimiento de las medidas sanitarias durante este próximo fin de semana, el primero tras el levantamiento del cierre perimetral.

«Los ayuntamientos son los que mejor conocer los lugares estratégicos y de mayor afluencia de visitantes, en especial, de gente joven», aseguró Bravo nada más acabar la reunión. «Las juntas locales son imprescindibles para identificar cuáles son esos puntos y determinar dónde es necesario reforzar la vigilancia policial», insistió.

APOYO DE LA GENERALITAT

La consellera apuntó también que los consistorios van a contar con el apoyo de la Generalitat, con los efectivos de la policía adscrita y también de los cuerpos y fuerzas de seguridad durante el fin de semana. «En especial, la Policía de la Generalitat colaborará en las tareas de control y vigilancia en los principales destinos turísticos, como Peñíscola, València, Gandia, o Benidorm», avanzó.

Bravo explicó que, desde los ayuntamientos, es necesario que se haga llegar a la ciudadanía que las restricciones «hay que respetarlas» y recordó que la Comunitat Valenciana ha dado « una lección de ciudadanía a España y a Europa. Somos el territorio que menor incidencia tiene desde hace nueve semanas, y no es una casualidad, es fruto del trabajo bien hecho, pero también fruto del gran sacrificio por parte de empresarios del ocio y de la hostelería, y también de la ciudadanía».

La titular de Justicia, Interior y Administración Pública dijo muy claro que en la Comunitat «no queremos imágenes lamentables, como las que vimos el fin de semana pasado, porque esas imágenes no conducen a la libertad, sino a la UCI, a incrementar la situación hospitalaria y, en ocasiones, conducen a la muerte. Queremos apostar por la responsabilidad, el civismo y la solidaridad».

EN PLAYAS Y PASEOS 

La pelota está ahora en el tejado de los municipios y los alcaldes han recogido el guante. «Como municipio turístico que somos tendremos especial vigilancia en los paseos marítimos y en las playas. Estamos en la recta final y es necesario recordar las medidas que siguen vigentes pues todos queremos poder tener un verano lo más normal posible», argumentó María Jiménez, la alcaldesa de Orpesa. 

En Vinaròs también son muy conscientes de lo que se avecina a partir de este fin de semana. «La Policía Local va a llevar a cabo unos dispositivos especiales de vigilancia y control del cumplimiento de las normativas y recomendaciones sanitarias, especialmente durante los turnos de los sábados por la tarde», describieron desde el Ayuntamiento. Esto supondrá «un incremento de la presencia policial» en varios puntos de la capital del Baix Maestrat, «a fin de controlar el consumo de alcohol en la vía pública, con la realización de controles de verificación de vehículos en diferentes puntos de la población y patrullas fijas en espacios de consumo habitual», como son principalmente la zona portuaria y el Limbo, ubicado en el paseo de Fora del Forat. 

Quien también dice estar preparado es Benicàssim. "Este va a ser un fin de semana de reencuentro y lo que nos ha pedido el president es que sea un reencuentro seguro, para tener un verano tranquilo en la Comunitat», subrayó la alcaldesa, Susana Marqués, que explicó que la localidad tiene experiencia en acoger a miles de personas cada verano, por lo que «está preparada para velar por el cumplimiento de las normas, trabajando como hemos hecho hasta ahora y en perfecta coordinación con la Guardia Civil». 

Reforzar turnos de noche

 El peso recaerá en las policías locales, pero el Gobierno valenciano se comprometió con los alcaldes y alcaldesas a que tendrán toda la colaboración de la Policía autonómica, la Guardia Civil y la Policía Nacional. Y además, estos últimos dos cuerpos van a reforzar los turnos de noche durante este fin de semana. Así lo anunció ayer la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, que explicó que el objetivo de la medida es que se cumplan las restricciones contra el coronavirus. «El fin de semana pasado fue relativamente tranquilo en la Comunitat, donde no hubo incidentes» dijo y confió en que este próximo tampoco los haya. « Las personas que vengan son bienvenidas, pero «saben que tienen que cumplir» las normas sanitarias que ha adoptado la Generalitat y que «tan bien» han ido. Con información de E. Bellido y X. Flores.