¿Quién compra viviendas de lujo en Castellón? La conocida como Golden Visa --por la que según la legislación española un extranjero residente en otro país puede adquirir la nacionalidad y la residencia aquí, vía exprés, tras una inversión inmobiliaria de 500.000 euros o más-- se ha mantenido estable pese al efecto del covid-19 durante el 2020. Aunque Castellón no es Alicante ni Baleares, y la compra de esta tipología de villas de alto estánding por parte de foráneos es aún muy baja, si en los inicios de esta normativa contaba con un par de operaciones anuales, ahora la tendencia apunta a cuatro o cinco en los últimos años.

Comprar varios inmuebles que en total sumen 500.000 € y alquilar varios es otra casuística

De fuera de la UE 

En concreto, el año covid dejó cuatro operaciones inmobiliarias por encima de los 500.000 euros en la provincia de Castellón, según la estadística del Colegio Notarial de la Comunitat: una de un inversor de Irán; otra de Qatar, otra de Reino Unido; y otra de Suiza. Tal y como se observa, y como recoge a su vez el Anuario de los Registradores de la Propiedad, las compras por parte de extranjeros de estos inmuebles de lujo apenas representaron un 0,60%, pero sí destaca que fueron principalmente no comunitarios (el 80%), frente a los comunitarios (20%, y que no necesitan este mecanismo de residencia por inversión, dado que ya son ciudadanos de la Unión Europea (UE)).

Los tunecinos son otro de los perfiles que vienen a invertir y se plantean viajar aquí cuando el covid pase

En cualquier caso, fuera de estas estadísticas, existen otros casos sin contabilizar, como aquellos de quienes superan esta inversión millonaria, pero sumando varias operaciones. Juan Carlos Rodríguez, director de oficina inmobiliaria de Área Vivendi en Castelló, cita que «es cierto que no son muchos los casos, pero sí hemos tenido clientes de Túnez que vienen a invertir este tipo de cantidad y se plantean venir cuando pase un poco esto y puedan viajar más. Buscan esta inversión de 500.000 euros por la nacionalidad y algunos movilizan el dinero y compran varios pisos entre 80.000 y 100.000 euros hasta llegar a esa cantidad y de paso lo rentabilizan para alquiler, usan una de ellos para vivir y tienen otras para cuando llegan los comerciales, en caso de ser empresarios. Algunos con más poder adquisitivo compran ya una vivienda más cara como, por ejemplo, un africano que compró en Lledó, en Castelló».

Retirarse con la jubilación o pasar largos periodos de tiempo de ocio en una zona costera del Mediterráneo, más económica, es uno de los puntos que valora el cliente ‘ Golden Visa’.