Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
¿Cómo es vivir en una furgoneta en Castellón?
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.
Alma tiene 51 años y vive una furgoneta. Una crisis personal se ha unido a la provocada por la pandemia para que está "ciudadana del mundo", como ella se define, esté pasando el último medio año de su vida en los apenas cinco metros cuadrados de su vehículo, actualmente su hogar. Su deambular por la Comunitat Valenciana ha tenido su última parada en Castelló, desde donde Alma nos cuenta su historia y cómo es vivir permanentemente sobre cuatro ruedas.