La Associació en Defensa de les Tradicions de Bous al Carrer reclama al Consell la definición de un protocolo consensuado de cara al regreso de estos actos a las calles con la mejora de la situación epidemiológica y la celebración de fiestas populares a partir de septiembre en las localidades de Castellón.
La organización ha remitido para ello un escrito al president de la Generalitat, Ximo Puig; la consellera de Sanitat, Ana Barceló; y el secretario autonómico de Seguridad y Emergencias, José María Ángel, instando al ejecutivo autonómico y, en concreto, a estos dos últimos departamentos, a «mantener reuniones con todos los agentes implicados y programar la vuelta a las calles, sin demorar más de lo necesario».
El regreso de los bous al carrer, considera la asociación, «no debe producirse con un protocolo realizado con prisas y sin consenso», pues apunta que «es necesario elaborar medidas asumibles para todos los organizadores y que tenga una normativa específica para maximizar la seguridad de los participantes».
El texto, suscrito por el presidente de la entidad, Alejandro Cano, destaca que el colectivo «ve la vuelta a la vía pública cada vez más cerca, aunque son muchas las poblaciones que organizan festejos en los meses de septiembre y octubre y se ven en la duda de programarlos en recintos cerrados --como ya se está haciendo-- o en las calles». Y es que, esta es una de las cuestiones que llevan a urgir al Consell unas medidas concretas y exigir «el mismo trato» que sectores como el mundo fallero, que «ya puede organizar eventos para septiembre y nosotros no».
Recuperación
Otro de los argumentos que esgrime la agrupación pasa por la recuperación de los efectos de la crisis derivada del coronavirus: «Muchos ganaderos y profesionales taurinos han seguido día a día alimentando a sus animales asumiendo un coste elevadísimo y sin poder generar ingresos», explican, a la vez que valoran que «nadie es culpable de la pandemia, pero depende de nosotros salir adelante y encontrar soluciones a las problemas».
«Pedimos comprensión y esfuerzo con un trato justo con todos los sectores, dejando a un lado cuestiones partidistas», concluyen desde la asociación, a la vez que instan a equipar la tradición con el valor que se da a «cualquier otra actividad cultural».
