Los datos de estoc de vivienda nueva sin vender que publica anualmente el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana no han dejado en los últimos años buenas señales para Castellón , y los de cierre del 2020, recién publicados, no han sido una excepción. Bien al contrario. Mientras que la media nacional marca un ligero descenso en el volumen de inmuebles acumulados, la provincia registró durante el último año un aumento de este indicador.
Las cifras son apabullantes y muestran hasta qué punto fueron profundos los efectos del boom inmobiliario que se desarrolló durante la primera parte de la década pasada. La población de Castellón significa el 1,2% del total de habitantes de España y, sin embargo, la provincia absorbe hasta el 5,43% del estoc total de vivienda nueva de todo el país. Son 24.803 inmuebles (a 1 de enero del 2019 había 24.625), más de los que las que tienen, por ejemplo, toda la comunidad autónoma de Galicia o la de Aragón. En definitiva, solo Madrid, Barcelona y Alicante acumulan más.
Poco descenso
Lo peor es que parece un problema de difícil solución, si es que la tiene. Durante la última década, pese a la mejoría de la situación económica tras la crisis del 2008, el mercado inmobiliario no ha sido capaz de absorber el elevado estoc que dicha época deja como herencia envenenada.
En el 2010, cuando se alcanzó el pico más alto de estoc en Castellón, había 34.366 viviendas nuevas sin vender. Es decir, que en el plazo de 11 años solo se ha conseguido reducir en un 28% este remanente de inmuebles. Mientras, en las provincias de Huelva, Guadalajara, Huesca, Guipúzcoa y Álava disminuyó más de un 10% solo durante el último año. Parece ciencia ficción llegar a los niveles que marcan Extremadura, Cantabria o el País Vasco, donde el nivel de estoc es cercano a cero.
Localización
Fuentes del mercado inmobiliario provincial consideran que gran parte de esas viviendas se van a quedar vacías "para siempre", ya que son casi imposibles de vender. La razón es que se sitúan en municipios que hoy en día no tienen ninguna demanda, pese a que a principios de la década pasada, un momento de expansión económica y demográfica --del año 2000 al 2007 la provincia ganó 100.000 habitantes--, sí la tenían.
Durante los últimos meses hay señales de reactivación de la construcción de promociones de suelo residencial, ya no solo de unifamiliares, sino también de bloques. Sin embargo, la actividad se centra fundamentalmente en Castelló y en algunas localidades de costa, aunque Vila-real también parece haber acabado con la sequía constructora.
Promociones que en la capital de la Plana pueden ayudar a elevar el precio medio del metro cuadrado, que sigue siendo uno de los más bajos de España entre las capitales de provincia.
