Las expectativas de recuperación de la crisis del covid-19 fijadas para este verano en sectores como la hostelería y el turismo están animando la puesta en marcha de nuevos restaurantes en Castellón.
El litoral de la provincia y, en especial, zonas como la comarca de la Plana Alta, están siendo testigos en las últimas semanas del regreso de las inauguraciones de establecimientos hosteleros, las cuales se sucederán a lo largo de estos meses con las obras que todavía se encuentran en marcha.
La tendencia la confirma la responsable de Turismo de la Cámara de Comercio de Castellón, Teresa Prim, quien apunta a las «numerosas» aperturas que están teniendo lugar en la costa provincial «y en particular Benicàssim y Orpesa, bien sean chiringuitos o locales con la intención de permanecer todo el año».
Esta visión la respaldan desde las agrupaciones de empresarios del sector. Juanjo Medina, presidente de la entidad de Benicàssim Ehosbe, defiende que la localidad «llevaba varios años con una tendencia de abrir varios locales que ahora regresa». El «auge del interés» por esta actividad «como una forma de hacer negocio» después de superar los meses más duros de la pandemia motiva que el gesto de levantar la persiana por primera vez deje de ser extraño.
Un ejemplo de la apuesta por el sector es el complejo Nuevo Puerto Azahar desarrollado por Giuliani’s Grupo en el Grau de Castelló y encabezado por su CEO, Álvaro Amores, con una oferta muy variada y diversa para dinamizar la zona marítima.
También en Orpesa, el máximo representante de la patronal, José Vives, detalla que «algunos locales que cerraron durante la pandemia ahora se han traspasado y están volviendo a abrir», lo que supone un alivio para la situación del sector, «después del escenario tan delicado del que venimos».
Más demanda
Si bien, la recuperación de niveles precovid en la afluencia a los bares y restaurantes constituye el principal aliciente para que se dé este desarrollo económico. El vicepresidente de la Asociación Provincial de Hostelería y Turismo (Ashotur), Luís Martí, valora que «la hostelería vinculada a zonas de playa está regresando con fuerza, porque la demanda empieza a responder». Una cuestión, que como matiza Vives, se percibe «desde que se levantó el cierre perimetral». De la misma forma, algunos nuevos locales también están abriendo en Alcossebre y Peñíscola, aunque no de forma tan numerosa como ocurre más hacia el sur provincial y sustituyendo a otros ya existentes que echaron el cierre.
Si bien, desde la Cámara de Comercio destacan la importancia de estas aperturas para «contribuir a la desestacionalización del turismo» en la provincia al «crear una oferta más amplia».
