La unidad de trasplantes renales, una reivindicación histórica de la provincia de Castellón, será por fin una realidad. El Diari Oficial de la Generalitat Valenciana (DOGV) publicó ayer la esperada resolución que somete a información pública el expediente administrativo para su autorización. Se inicia así un proceso que desembocará, según las estimaciones de Alcer Castalia, en que la unidad sea en el 2023 una realidad en el Hospital General de Castelló. 

«Calculamos que estará lista en año y medio, porque además hay que formar médicos e incorporar personal y eso requiere un tiempo», explica Juan Doménech, presidente de Alcer Castalia, la organización que ha liderado la lucha por conseguir que la provincia de Castellón tuviera lo que ya tienen en València, Alicante y Elche. «Era algo de justicia», sentencia Doménech. «Esto es una demostración palpable de que la sociedad, cuando se une, obtiene resultados en sus reivindicaciones. A veces la justicia hay que exigirla», añade.

No en vano, la lucha de Alcer ha ido sumando numerosos aliados. «Desde la sociedad civil a los partidos políticos pasando por los medios de comunicación. En esto no ha habido colores ni partidismos», destaca Doménech. Tanto la Diputación como el Ayuntamiento, cabe destacar, reclamaron la creación de la unidad de trasplante renal en el Hospital General.

Los plazos 

Ahora, una vez pasen los 20 días y resuelvan las posibles alegaciones, podrá emitirse la firma de la autorización, que supondrá la primera acreditación como centro trasplantador. La solicitud de autorización, según explicó la Conselleria de Sanitat en un comunicado, fue remitida a principios del presente año. En el expediente de autorización se recoge toda la documentación necesaria para acreditar el cumplimiento de los requisitos exigidos tanto por la Conselleria como por la Organización Nacional de Trasplantes (ONT). Con la aprobación de este trámite, el Hospital General Universitario de Castelló se convertirá en el primero de la provincia en conseguir esta autorización.

Una vez obtenida, el centro hospitalario deberá iniciar una serie de procedimientos internos para adaptar la actividad como centro trasplantador. De esta forma, una vez concluidos estos cambios, la población castellonense pendiente de estas intervenciones, podrá ser trasplantada en Castelló sin necesidad de desplazarse a otros centros, como ocurre ahora. Esta situación contrasta con la implicación de la sociedad castellonense. No en vano, durante los seis primeros meses del 2021, el Hospital General de Castelló ha registrado 17 donaciones multiorgánicas y una donación de tejidos. Gracias a estos registros, el Departamento se sitúa en una tasa de 70 donantes por cada millón de habitantes, una cifra por encima de la media nacional, que hace que Castelló se sitúe entre las poblaciones más solidarias en cuanto a donación. 

UN NUEVO HOSPITAL

Juan Doménech, presidente de Alcer Castalia, era ayer un hombre feliz. La publicación en el DOGV suponía el premio a una importante labor de reivindicación desde la sociedad civil en general, y desde Alcer en concreto. Pese a la consecución de este logro para Castellón, Doménech advertía de que «esto no quita que sigamos exigiendo otras mejoras sanitarias». Por ejemplo, indicó la situación del propio Hospital General. «Nos queda mucho que reivindicar porque las futuras generaciones se merecen una sanidad mejor, y así lo están reclamando ya. Es necesario un nuevo Hospital para Castelló, porque el actual tiene ya medio siglo, mientras en otras poblaciones de la Comunitat se están construyendo otros nuevos. Las infraestructuras en el Hospital de Castelló ya no están adecuadas a su tiempo», indicó.