La Diputación de Castellón reclama a la Comisión Europea «un equilibrio entre la sostenibilidad ecológica y económica de la pesca» ante las dificultades que atraviesa el sector por la aplicación del reglamento sobre la gestión de las capturas que reduce los días en que las embarcaciones pueden faenar.

Así lo defendió este martes el presidente provincial, José Martí, en un encuentro con representantes de la Cofradía de Benicarló, entre ellos el patrón mayor, Francisco Querol; junto al director general de Pesca de la Generalitat Valenciana, Antonio Quintana; y representantes de la localidad como su alcaldesa, Xaro Miralles.

Martí insistió en que «detrás de las medidas que se adoptan en Bruselas hay familias que tienen derecho a poder desarrollar su proyecto vital», a la vez que hizo hincapié en la importancia del sector y su vinculación con el turismo y la gastronomía de la zona.

Por ello, el presidente provincial abogó, pese a carecer de competencias en la materia, por «ir de la mano de la Generalitat y el Gobierno de España para defender a un sector que es vital para nuestra economía». añadió.

Mientras, Quintana expresó que «hay razones para un optimismo moderado» ante el trabajo de las administraciones para «convencer a la Comisión Europea de que existen soluciones que se pueden aplicar sin poner en riesgo la viabilidad del sector».

Plazos inviables

Unas alternativas que para el director general «tienen que venir de la mano de la ciencia y de las administraciones, pero teniendo claro que los objetivos fijados no se pueden cumplir en solo cinco años», criticó sobre la estrategia europea. 

Mientras, el patrón mayor recordó que «no queremos ayudas, tan solo que nos dejen faenar y subsistir». Un derecho que también defendió la munícipe de la localidad, en línea con las exigencias de las otras cofradías de la provincia, que ya protagonizaron protestas en los puertos con tal de visibilizar el impacto de la reducción de las jornadas pesqueras para la supervivencia de esta actividad económica.