La quinta ola del covid-19 está trastocando el porvenir favorable que aguardaban muchos sectores, entre ellos el del turismo de Castellón. El secretario autonómico de Turisme Comunitat Valenciana, Francesc Colomer, rebajó este viernes las expectativas de mejora y recuperación de cara a la temporada estival: «Pensamos que el 2021 era un año de transición y recuperación progresiva, aunque la última irrupción del covid ha ensombrecido todas las perspectivas de verano que teníamos», señaló el dirigente en un acto en Castelló.

El auge de los contagios está suponiendo un nuevo golpe para los establecimientos hoteleros. «Es un tiempo muy complicado», afirmó Colomer, quien instó a poner el foco en el ritmo de vacunación para «establecer una estrategia y tener esperanza», pues «este es el reto que tenemos, como sociedad y para la economía».

Adaptación

Si bien, el secretario autonómico reconoció también el «gran esfuerzo de adaptación y de comprensión de las dificultades» del sector de los festivales, entre ellos los que acoge Castellón, «para tratar de ofrecer una propuesta que haga menos aburrida la Comunitat Valenciana a pesar de la crisis, pues ha habido una reconversión y hay en marcha una serie de programación de conciertos en otros formatos», lo que ha significado «un sacrificio con la reducción de los aforos», a lo que se han sumado las nuevas medidas a causa de la propagación del virus.

En cualquier caso, Colomer apuntó que «lo primero siempre será hacer caso a Sanitat, que toma decisiones de acuerdo con criterios, y buscar la compatibilidad y la convivencia con el virus».

Por ello, el dirigente puso en valor el papel que jugará el pasaporte digital verde europeo, el cual acredita las personas inmunizadas o con una prueba negativa, para recuperar el gran formato de estos acontecimientos previo a la crisis, lo que ya es «una hipótesis de trabajo» de la administración: «Más allá de que sirva para cruzar fronteras, la propia Comisión Europea lo recomendaba en usos sociales, culturales y musicales».

Legislación

Colomer matizó en este sentido que «corresponde al Gobierno central legislar para implementar ese formato, que es una herramienta de seguridad sanitaria y podría ser un perfecto elemento para la recuperación de formatos mayores».

«Al final, los grandes festivales si pierden tanta masa crítica de gente no son ni viables ni rentables», concluyó el responsable valenciano de Turisme. Habrá que aguardar aún a que la mencionada propuesta se materialice desde las autoridades sanitarias para restaurar la celebración de los grandes eventos tan típicos para la provincia de Castellón.