El 1 de septiembre empieza la nueva campaña citrícola. Una temporada que se prevé muy complicada por dos factores que afectan esencialmente a la zona de la Plana: la expansión sin control del cotonet y las expectativas de una menor producción. El responsable de citricultura de la Unió de Llauradors, José Francisco Nebot, señala que ya en el pasado año las mermas por esta plaga «llegaron a ser del 10% de toda la producción, lo que supuso grandes pérdidas económicas». A falta de conocer los datos del primer aforo de cítricos, la expansión del cotonet en los últimos meses apunta a unos daños mucho mayores para este año.

Nebot pone el foco en la situación de las fincas más afectadas. «Con que tengan más del 30% de árboles daños, no será fácil que se pueda llegar a recolectar». Desde la Asociación Valenciana de Agricultores (AVA), afirman que los tratamientos de lucha impulsados desde las diferentes administraciones «han sido un fracaso». Algo que también se puso de manifiesto en el último pleno de la Diputación, que trató la problemática, y donde se citó el balance negativo de las cooperativas.

La clave está en la prohibición por parte de la Unión Europea de fitosanitarios con el metil clorpirifos como materia activa. Una sustancia que, hasta su retirada, pudo contener la expansión de la plaga. En cambio la actual lucha biológica, con suelta de parasitoides, trampas con feromonas y la autorización de productos de menos efectividad que el vetado por la UE no han disminuido la llegada del insecto. «Creemos que habrá una efectividad a medio plazo, pero mientras tanto hay que dar solución al problema que tenemos ahora», comentó Nebot.

Petición

La semana pasada tanto la Unió como AVA se reunieron con la consellera de Agricultura, Mireia Mollà, para poner encima de la mesa una autorización puntual del metil clorpirifos, y que la aplicación del producto se haga a través de la empresa pública Tragsa, para que haya el máximo control y no deje residuos en la recolección. Algo que ya sería para el 2022, y que no afectará a la inminente campaña. Están a la espera de recibir una respuesta. 

Exportadores conocen el método alternativo hallado en Castellón

A finales de abril, en plena expansión de esta plaga, este periódico dio cuenta de un método alternativo para el cotonet dado a conocer por asociaciones de agricultores de Nules y Vila-real. Un método que combina el uso de un producto, el Tecnokel, con la utilización de feromonas. El miércoles hubo una reunión en el Comité de Gestión de Cítricos, organismo que agrupa a los grandes exportadores, para conocer sus posibilidades. Algunos de los asistentes se mostraron esperanzados por la técnica, aunque para un uso masivo debe pasar por el aval científico y recibir las necesarias autorizaciones. Desde el instituto de investigaciones agrarias, Ivia, indican que la efectividad ronda el 55%.