La Diputación de Castellón detalla los procedimientos a seguir en la línea de ayudas creada para este año en la lucha contra el cotonet, y que consiste en la subvención de insectarios para criar parasitoides que permitan reducir la incidencia de la plaga. El Boletín Oficial de la Provincia (BOP) publica en su último número la concreción de las bases, que establece cómo será el reparto de la partida aprobada, que asciende a 50.000 euros.

El punto más relevante tiene que ver con la financiación de las actividades subvencionadas. La aportación máxima para cada beneficiario será de 8.000 euros y la inversión a presentar deberá tener un límite de 10.000 euros. De esta manera, el porcentaje de la ayuda se sitúa en el 80%.

Las bases reafirman que serán las cooperativas agroalimentarias que operan en el sector citrícola de la provincia las entidades que podrán entrar en esta convocatoria. El plan trazado desde el área de Desarrollo Rural contempla que las mismas dispongan de espacios para la cría de ejemplares de Anagyrus aberiae, el parasitoide importado desde Sudáfrica y que ataca las larvas del cotonet. En estos momentos ya hay insectarios, como el del Instituto Valenciano de Investigaciones Agrarias (IVIA) en Almassora, pero el objetivo es multiplicar la presencia de Anagyrus por los campos. Con ello pretenden reducir la incidencia de la principal pesadilla de los agricultores de la Plana, que es la zona de la Comunitat más afectada por la plaga. La partida creada por la Administración provincial también contempla que los insectarios críen otra especie, Cryptoleamus montrouzieri, considerada útil para otras plagas del campo.

La construcción de estos espacios servirá de prueba para evaluar la efectividad de esta lucha biológica en la erradicación del cotonet. Si fuese el caso se estudiaría ampliar el apoyo a esta iniciativa.

Más beneficiarios

El diputado de Desarrollo Rural, Santi Pérez, señaló recientemente, tras un encuentro telemático con representantes de cooperativas de la provincia, que la aplicación de este remedio no solo beneficiará a los campos asociados a las cooperativas concesionarias de las ayudas, «porque, obviamente, una vez se distribuyan los parásitos actuarán en su libre albedrío y no solo en los huertos de los cooperativistas». Los gastos subvencionables serán tanto la compra de suministros como la construcción de estos espacios destinados a insectario.