El Ayuntamiento de Castelló ha dado un paso adelante muy importante para cumplir con el pago a varios proveedores y empresas que prestan servicios para el Ayuntamiento. El equipo de gobierno recibió ayer el visto bueno de Intervención para convocar hoy la junta extraordinaria de gobierno local, siguiente paso para la aprobar el pago de tres reconocimientos de crédito por valor de casi 5,7 millones de euros. Entre los abonos están las facturas de la empresa del Servicio de Asistencia Domiciliaria (SAD), cuyos trabajadores vienen desarrollando concentraciones de protesta y habían anunciado una huelga para mañana jueves. Los reconocimientos tendrán que ser refrendados por un pleno extraordinario que ya tiene fecha, el lunes 9. De esta forma el consistorio cumplirá lo que anunció el portavoz del equipo de gobierno, José Luis López, quien manifestó que estaban trabajando con toda la rapidez posible para convocar esa junta de gobierno extraordinaria esta semana y poder atender los pagos. Entre sus reivindicaciones, las trabajadoras del SAD, un servicio que atiende a 206 personas dependientes, desvelaron que iban a dejar de percibir sus salarios porque la empresa no dispone de fondos suficientes para poder abonarlos, de ahí la necesidad de encontrar una solución.

Entre los motivos que aludió la corporación municipal para no atender los abonos se encontraba el hecho de que se trata de facturas generadas por contratos finalizados y no renovados o en trámite de hacerlo. Por eso, y porque «todos los ayuntamientos» han «abusado mucho de esta figura de los reconocimientos extrajudiciales de crédito, que deberían ser alternativas excepcionales y no método para el pago cotidiano», según justificó López, el consistorio recibió una advertencia de la Sindicatura de Cuentas y han tenido que habilitar los informes justificativos para poder abonarlas.

Desde los grupos del Fadrell venían discrepando sobre la retención de los reconocimientos. Unos pedían prudencia, como recomendaban los técnicos, mientras otros justifican que no podían mantener a las empresas sin cobrar y era necesario justificar mucho más que antes, pero pagar.