La delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Gloria Calero, ha abogado este miércoles por esperar a estudiar la implantación del certificado covid en establecimientos a la vacunación de la gran mayoría de los valencianos, así como hasta que haya un marco general en España.

Así ha coincidido con la postura del president de la Generalitat y la consellera de Sanidad, los también socialistas Ximo Puig y Ana Barceló, que ven discriminatorio aplicar esta medida sin que los más jóvenes hayan podido acceder a sus dosis. En otras comunidades como Galicia o Canarias ya está implantado, mientras Andalucía ha pedido el aval de la justicia.

Calero, en rueda de prensa, se ha limitado a destacar la "prudencia" con la que la Generalitat gestiona la pandemia y que "Puig está acertado en la decisión de esperar". También ha recordado que la sanidad está transferida a las autonomías, por lo que considera que la Conselleria podría aplicar esta medida dentro de su ámbito aunque "tendrá que haber competencias del Estado".

Cumplimiento de las restricciones

Sobre el cumplimiento de las últimas restricciones vigentes hasta el 16 de agosto, como el toque de queda en 77 municipios en riesgo, ha reconocido que "está siendo más difícil de controlar por buen tiempo y por la sensación de que la vacuna ya nos está librando de todo". Pero ha resaltado que los valencianos cumplen mayoritariamente y que "es una minoría la que se está saltando las normas".

Ha lamentado además que "no hay soluciones fáciles" para controlar que no se produzcan botellones, ya que cree que todo depende de la educación y de "las formas de divertirnos". Tras reconocer que "mucha gente joven no puede entrar en una discoteca porque los precios están como están", ha advertido que "tampoco es saludable ponerse detrás de un coche y venga a beber", con o sin pandemia.