No solo han igualado las cifras del verano anterior a la pandemia, sino que han superado los números de los últimos años, según reflejan los datos de ocupación en apartamentos turísticos y cámpings correspondientes a julio en Castellón, difundidos por el Instituto Nacional de Estadística (INE). En el caso de los apartamentos, casi alcanzan el nivel del 2017, por lo que suponen el récord de los últimos cuatro ejercicios, mientras que los campamentos vacacionales superan en viajeros a los últimos cinco años.

La clave que explica este fenómeno es el buen comportamiento del turismo nacional, que ha acudido en masa. En cambio, los visitantes procedentes de otros países han venido en mucha mayor medida que en el estío del 2020, pero todavía siguen lejos de los años anteriores al coronavirus.

Los apartamentos consiguieron en la provincia un total de 76.936 visitantes, más del doble que los 36.897 del verano pasado. Además, superan los más de 74.000 del 2019, los 65.600 del 2018 y se quedan a poca distancia de los 81.701 del 2017. Si se mira al detalle el origen de los clientes en esta modalidad, se observa el brusco aumento de gente procedente del propio país. La subida de la clientela autóctona es del 108%. En cambio, los extranjeros, 10.637, mejoran a los 5.109 del pasado año pero quedan lejos de los 13.618 del 2019. En lo que respecta a las pernoctaciones, en julio superaron la barrera mental del medio millón, con 500.243.

Los campings rebasaron las 250.000 pernoctaciones en la provincia, gracias también al impulso generado por el turista nacional. Con 215.663 visitantes, en los últimos años solo hubo más público del país en el 2018, con apenas 2.000 personas menos. 

La presencia de extranjeros fue de 34.524, casi la mitad de los 60.454 registrados en julio del ejercicio del 2018.

Tendencias

Las dificultades existentes este verano para viajar a otros países --y a la vez recibir a gente desde el exterior-- han tenido una gran influencia en estos resultados. Muchos de los que tenían por costumbre salir de España para pasar sus vacaciones han optado por los destinos nacionales durante estos tiempos de pandemia. En cuanto a los extranjeros, se detecta una reactivación, pero todavía a un nivel débil. 

Tanto los responsables de Turisme Comunitat Valenciana como las patronales del sector destacan que julio, y especialmente agosto, los hoteles han funcionado mejor de lo inicialmente esperado. En todo el territorio autonómico hay más visitantes nacionales, y se detecta la caída del visitante británico como consecuencia de la quinta ola, pero es Castellón la zona que mejores ocupaciones ha registrado. Los datos que semanalmente ofrece Hosbec muestran que, con apenas hoteles cerrados como consecuencia de la pandemia, la ocupación rebasó el 90% en las jornadas centrales de agosto, mientras que el pasado fin de semana se registró un 87,4%. Las perspectivas para septiembre son favorables, gracias al nivel de reservas previos y si el tiempo acompaña. Además, en unos días vuelve el Bono Viaje.